Pequeño gran móvil

El pequeñín de la familia Z tiene nada menos que 4,3 pulgadas y destaca por una cámara insuperable en la gama media/alta.

Sony Xperia Z1 Compact
Pequeño gran móvil

Una perfecta miniaturización de su hermano mayor, eso es el Z1 Compact de Sony, un terminal que, con unas generosas 4,3 pulgadas de diagonal, reduce el tamaño y, afortunadamente, también el precio, del tope de gama de Sony.


El diseño es calcado a todos los terminales de la gama Z: cristal por delante, cristal por detrás y un perfil metálico. Un conjunto que da un tono elegante y serio a este pequeñín. Aunque agradable a la vista, en la mano el Xperia Z1 en miniatura no es muy ergonómico, y aunque es un terminal muy sólido, tanto cristal aporta cierta sensación de fragilidad que es difícil sacarse de la cabeza.


Pero, a pesar de las apariencias, el Z1 Compact es un terminal de lo más resistente. Al igual que el resto de miembros de la familia es muy dado a los chapuzones, ya sean estos fortuitos o para presumir de móvil sumergible con los amigos, y también es resistente al polvo, lo que lo convierte en un compañero ideal para los días de playa que ya asoman en el horizonte.


Aunque su pantalla no es Full HD, la resolución de 1280x720 píxeles es más que suficiente para que, en un panel de 4,3 pulgadas, el ojo humano lo tenga francamente difícil para distinguir un píxel. La pantalla se ve bien en exteriores, incluso a plena luz del día, y no consume más batería o potencia gráfica de la estrictamente necesaria ¿Qué más se le puede pedir?


En cuanto a su corazón, late a 2,2 Ghz con cuatro núcleos y 2 GB de memoria RAM. Existen móviles más potentes, pero, sinceramente, más potencia solo serviría para lucir mejor en los test de rendimiento y consumir más batería, que por cierto se comporta muy bien y permite llegar al final del día con casi la mitad del depósito lleno si el uso que le damos no es excesivo.


El sistema operativo es la versión 4.4 KitKat de Android, adornada con una capa de personalización bastante pobre que se podrían haber ahorrado.


Sin embargo, si algo tiene de bueno Android es que permite modificar prácticamente todos los aspectos del teléfono, por lo que a los más perfeccionistas no les costará mucho dejar el terminal a su gusto.


La cámara es, sin duda, el punto fuerte de este ‘smartphone’. El sensor Exmor RS para móviles de 1/2,3 pulgadas, sus 20,7 MPx, su lente gran angular de 27 mm. con una apertura F2.0 y el procesador de imagen dedicado, podrían ser solo una enumeración de cifras y nombres para tratar de impresionar, si no fuera porque el Z1 Compact hace unas fotografías y unos vídeos realmente impresionantes.


Aunque por su tamaño se puede quedar pequeño para aquellos usuarios que ya se han acostumbrado a grandes terminales de más de 5 pulgadas, aquellos que quieran aprovechar un poco más sus bolsillos pueden llevarse un buen teléfono, siempre y cuando estén dispuestos a pagar los 480 euros que cuesta.