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Iqos, Blue y Juul, alternativas al cigarrillo que son "tan dañinas como el tabaco"

Los médicos ven con "preocupación" la influencia de determinadas marcas que, por su apoyo publicitario, resultan más atrayentes para los jóvenes y alertan del riesgo de consumir estos productos con nicotina.

El doctor Alfonso Pérez Trullén, jefe del servicio de Neumología y responsable de la consulta de Deshabituación Tabáquica en el Hospital Clínico de Zaragoza.
El doctor Alfonso Pérez Trullén, jefe del servicio de Neumología y responsable de la consulta de Deshabituación Tabáquica en el Hospital Clínico de Zaragoza.
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Los jóvenes empiezan a consumir tabaco a edades cada vez más tempranas y a pesar de los esfuerzos que se invierten en campañas de prevención del tabaquismo, las modas llegadas de EE. UU. y la influencia de la industria publicitaria son factores que juegan en contra de esta lucha sanitaria. "Nos preocupan desde el simple cartucho a las nuevas tecnologías que hay para impulsar el vaporeo o el consumo de la pipa de agua. Existen sistemas de calentamiento que marcan una pauta tecnológica de alto 'standing' -y que casi casi los podríamos comparar con un iPhone-. El problema es que muchos de estos productos tienen más nicotina que el tabaco, y eso es lo que verdaderamente atrae a seguir consumiendo", explica el doctor Alfonso Pérez Trullén, jefe del servicio de Neumología y responsable de la consulta de Deshabituación Tabáquica del Hospital Clínico de Zaragoza

En esta consulta para dejar de fumar atienden de media unas 500 visitas al año. A cierre de 2019 rondaban las 700, con un perfil de pacientes muy variado: desde trabajadores del propio hospital a pacientes jóvenes o enfermos crónicos que han desarrollado otras patologías de larga evolución asociadas al consumo de tabaco (cáncer de pulmón, infartos, enfermedades cardiovasculares o EPOC). "El problema es que el tabaco no suele ser una afección inmediata y cuando quieren dejar de fumar la mayoría es gente mayor, pero tenemos pacientes de todas las edades. Hemos tenido fumadores de 25, de 30, de 40, de 65 años...", señala Pérez Trullén, "preocupado" por la "temprana" edad de inicio de consumo de tabaco entre los jóvenes. 

Según datos de la Encuesta sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias en España (ESTUDES), el consumo de las sustancias con una mayor prevalencia (alcohol y tabaco) por término medio ronda los 14 años.

En Aragón, precisa este especialista, el consumo de tabaco ha aumentado entre la franja de edad de los 14 a los 18 años (pasando de un 20% al 39,4%). "La edad de inicio está bajando, y nos preocupa porque el tabaco es la puerta de entrada a otras drogas. Aproximadamente al año de experimentar con esta sustancia, los pacientes se vuelven fumadores diarios y cada vez necesitan fumar más para encontrar esa satisfacción", advierte este neumólogo, que insta a la sociedad a "no bajar la guardia" en la lucha contra el tabaquismo. 

Adictos "duales"

La influencia de la industria publicitaria, la moda del vaporeo y los nuevos productos llegados de EE. UU., que se publicitan en ocasiones como una "alternativa" al cigarrillo electrónico, juegan en contra de los esfuerzos que realizan en estas consultas tanto los expertos como los pacientes que quieren dejar de fumar. 

"La publicidad influye muchísimo e igual que en los años 50 se hacían fotografías para estimular la venta de cigarrillos convencionales, ahora las han adaptado para incentivar el consumo del vaporeo con actores de moda o Youtubers", advierte este neumólogo, que carga contra algunos productos que van ganando adeptos entre los jóvenes. 

Juul, el cigarrillo con forma de 'USB'

Uno de estos productos considerados "perjudiciales" es Juul, cuyo fabricante tiene una investigación abierta por sus estrategias de márquetin y supuestos anuncios engañosos dirigidos a menores. "Los jóvenes de hoy en día suelen recurrir al Blue y al Juul (una especie de 'USB' que arrasa entre adolescentes), pero los más frikis o uno que esté enganchado a las nuevas tecnologías recurren al I-qos, un aparato muy sofisticado que lleva toda la mecánica de un pequeño disco duro, con su botón de encendido, resistencia, batería... Muchos se piensan que van a dejar de fumar con esto, pero en realidad como consumen más nicotina se hacen adictos duales: en sitios que está permitido fumar se fuman sus cigarrillos, y donde no lo está, recurren a estos vapeadores", explica el experto, al advertir de la presencia de nicotina en la mayoría de estos "nuevos inventos" llegados de Silicon Valley. 

"El 60% de quienes utilizan estos vapeadores los usan con nicotina, y muchos de estos productos tienen más carga que un cigarrillo normal. El vaporeo hace que se le pierdan el miedo a estas sustancias y se vea como algo menos dañino, pero en realidad muchos productos tienen la misma nicotina o más que el tabaco, y esta es lo que verdaderamente atrae a seguir consumiendo", subraya este especialista, que insta a impulsar más campañas de concienciación para alejar a los jóvenes de su consumo.

"Mis primeros pinitos fueron con adolescentes dando charlas en colegios e institutos, y mientras la experiencia me dice que es muy fácil sensibilizar para que no se inicien en el consumo de tabaco, hacerlo para que lo dejen resulta muy difícil. Yo prefiero prevenir que curar, aunque siempre es posible dejar de fumar", concluye este especialista, que aconseja "siempre" ponerse en manos de un profesional para que sea un médico quien aconseje el fármaco recomendado, la dosis y la duración del tratamiento oportuno en cada caso. 

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