La ópera, ese espectáculo imbatible en el que la música más excelsa y lo más refinado de las artes escénicas se abrazan, se goza en los grandes auditorios que se reparten por el planeta, pero también existe la posibilidad de hacerlo a distancia, en una gran pantalla y cómodamente instalado en una butaca.

El cine Cervantes de Zaragoza se ha convertido en los últimos tiempos en el punto de encuentro de muchos de los amantes del bel canto en la capital aragonesa. Periódicamente se proyectan representaciones desde emblemáticos auditorios, en ocasiones en directo y otras en diferido. 

Este martes 26 de marzo se produjo el primero de los casos, con la emisión en vivo de 'Madama Butterfly', de Giacomo Puccini, desde la Royal Opera House de Londres. Un poderoso reclamo que hizo que se completara tres cuartos del aforo de la sala. 

Un público mayoritariamente de edad avanzada se citó para disfrutar del evento. A las 20.15 se apagaron las luces y apareció en pantalla la presentadora que, desde el mismísimo corazón del Covent Garden londinense, intervino en los minutos previos y en el intermedio ofreciendo interesantes datos sobre la obra y entrevistando a profesionales relacionados con distintos ámbitos, desde el jefe de Iluminación hasta una especialista y asesora musical. Unas palabras que fueron complementadas con reportajes sobre los ensayos y declaraciones del director Kevin John Edusei, de la soprano Asmik Grigorian y del tenor Joshua Guerrero.  

Un viaje de 195 minutos de duración que comprendió los tres actos de la ópera de Puccini en la que una geisha contrae matrimonio con un apuesto oficial de la marina estadounidense. Lo que ella ansiaba que fuera un amor eterno para él no era más que un pasatiempo. Una disparidad dramática con final funesto que Puccini plasmó con maestría. A tenor de los aplausos registrados en el Cervantes, la historia caló y mucho entre los asistentes. 

Una de las peculiaridades de este evento es que en el intermedio, tras el primer acto, los espectadores se dirigieron al 'hall' del cine para degustar una copa de champán y departir durante un cuarto de hora. 

La próxima cita en el calendario operístico en el Cervantes será el próximo 11 de abril (en diferido) con 'Tosca', también de Puccini, desde la espectacular cantera de St. Margarethen (Principado de Liechtenstein), con sus abruptos desfiladeros y suaves colinas como inigualable escenario.