Las comisarías de la Policía Nacional de Zaragoza donde se tramitan las renovaciones del DNI y el pasaporte, entre otros servicios, se encuentran desbordadas. El motivo no es otro que el requerimiento de las entidades financieras a sus clientes para que presenten su documento nacional de identidad a riesgo de ver su dinero bloqueado.

La falta de previsión por parte de los titulares de cuentas bancarias, que en muchos casos tenían el DNI caducado o extraviado, ha disparado el número de solicitudes, lo que ha puesto en jaque a los agentes del área de Documentación de la Policía. Su responsable en Zaragoza, el inspector Miguel Ángel Andrés, asegura que están “haciendo todo lo posible para atender a todo el mundo en las mejores condiciones”, pero lamenta las prisas con que se ha desarrollado todo el proceso por parte de la banca.

Como consecuencia, el sistema de cita previa que rige el procedimiento de renovación se ha saturado en las últimas semanas y en algunos casos ya solo se puede conseguir fecha para dentro de más de un mes. En la capital aragonesa, estos trámites se llevan a cabo en cinco comisarías o equipos. Tres pequeños (Arrabal, Áctur y San José) donde la espera ya supera el mes frente a los 12 días de media que se registraban por estas fechas en años anteriores, y dos grandes (Pº Teruel y Delicias) que han pasado de 8 a 22 días.

Además, y aunque “el 95% de las atenciones provienen de la cita previa”, existe la posibilidad de acudir directamente a las comisarías en busca de una cita presencial. En los equipos pequeños solo para casos de urgencia (un robo, por ejemplo), y en los grandes, para cualquier ciudadano, “pensando en la gente que no sabe o no puede usar internet”, explica Andrés.

Pero este recurso también se ha visto afectado, y no es raro encontrar a cincuenta personas esperando a que se abran las puertas de las comisarías, “algo impensable en verano, y muchos menos en mayo”, relata el inspector, quien asegura que “mucha gente, al ver que la cita previa les daba una fecha posterior” al límite marcado por los bancos “venían pidiendo una cita como fuera”.

En muchos casos se trata de gente de avanzada edad que acude incluso con el temor de perder el dinero que tienen en el banco y, aunque no sea su cometido, los agentes hacen una labor de información para tranquilizarles en este sentido.

Crece la demanda de pasaportes

Paralelamente, en el servicio de gestión de pasaportes también se ha notado un sensible aumento de la demanda, que ha incrementado el tiempo de espera para conseguir cita de 4 días a una semana. En este caso, la Policía explica que se debe fundamentalmente a los viajeros más previsores, que ya preparan sus vacaciones de verano.

Algunas ofertas de operadores de turismo lo exigen para reservar el viaje con meses de antelación y así contratarlo a un menor precio. Además, la tímida recuperación económica parece estar animando el sector y cada vez más gente planea sus vacaciones fuera del país.