gastronomía
Dos jóvenes del IES Matarraña se convierten en las promesas de la cocina aragonesa
El uso de los productos de Aragón era imprescindible para participar en el certamen en recuerdo del cocinero Rubén Ríos.
Sara Correa, de Alcañiz, y Saúl Gil, de Maella, son las nuevas promesas de la cocina aragonesa. Este par de estudiantes del IES Matarraña de Valderrobres se han alzado con el primer premio en el Certamen Jóvenes Promesas de la Cocina Aragonesa 'Rubén Ríos' que se ha celebrado este lunes en el IES Miralbueno de Zaragoza.
Correa y Gil han preparado un cuello de Ternasco de Aragón en forma de lingote, con cardo y un crujiente de patata. "En la base hemos puesto una crema de almendra, ya que hemos querido hacer un guiño al plato tradicional de cardo con almendra pero de una forma más moderna", han señalado los jóvenes.
El bocado dulce ha sido un 'petit four': "Es un bombón relleno de 'ganache' de limón, para potenciar el sabor, junto con almendra tostada y gel de tomillo". La presentación también ha sido pensada, ya que este dulce lo han servido en una piedra río de Matarraña en homenaje a la llegada del chocolate a Europa, a través del zaragozano Monasterio de Piedra.
"No nos esperábamos tanto nivel, ha superado a los años anteriores", ha incidido Javier Robles, presidente de la Asociación de Cocineros de Aragón, entidad organizadora del certamen. Robles ha resaltado la participación de las tres provincias. Se han presentado alumnos del IES Juan de Lanuza, de Borja; del IES Matarraña, de Valderrobres; del CPIFP Teruel; de la Escuela de Hostelería Topi, de Zaragoza; del IES Miralbueno, también de la capital aragonesa; y, del CPIFP San Lorenzo, de Huesca. "Hay cantera, mucho nivel -ha insistido el presidente-, el día de mañana vamos a en restaurantes de estrella Michelin".
El jurado ha estado compuesto por Ramón Lapuyade, Rubén Catalán y Cristian Palacio, ha tenido en cuenta el conocimiento que los alumnos han mostrado sobre los mismos.
El segundo puesto ha viajado a Huesca, para Cristian Emanuel Bradescu, por un 'sarmale' rumano y aragonés: "He querido hacer un guiño al país de mis padres, pero utilizando producto de la tierra como el arroz Brazal y el Ternasco de Aragón IGP". Su lamín ha sido un falso pastel ruso. Por último, el bronce se lo han llevado Cruz de Lorena Romeo y Gabriela Cervós, en representación a la Escuela de Hostelería Topi, de Zaragoza. Estas jóvenes han servido un taco de birria al chilindrón con melocotón y miel.
Una de las condiciones era el uso de ingredientes aragoneses. "Desde la consejería queremos poner en valor la alimentación y hay una cuestión que nos falta: juntar la habilidad con los extraordinarios productos y que el comensal pueda experimentar el sabor y la explosión de cada uno de ellos", ha argumentado Ángel Samper, consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Gobierno de Aragón.
