El de alquezrana, segundo varietal de Aceites Alía

Este aceite se caracteriza por su intenso sabor afrutado que recuerda a la alcachofa y se elabora con una oliva autóctona de Alquézar, en la comarca del Somontano de Barbastro.

La alquezrana es la variedad propia de los campos que rodean Alquézar.
La alquezrana es la variedad propia de los campos que rodean Alquézar.

La segunda campaña de actividad de Aceites Alía acaba de presentar este 2015 Milvus, un aceite monovarietal de alquezrana, elaborado con esta oliva autóctona de la localidad de Alquézar, en la comarca del Somontano de Barbastro que está en peligro de extinción.


La alquezrana es la variedad de olivos propia de los campos que rodean Alquézar y la protagonista de este AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra). Se caracteriza por su intenso sabor frutado que recuerda a la alcachofa y a hierba recién cortada.


Su nombre significa 'milano' en latín, ave también propia del Alto Aragón, y es la segunda propuesta de esta joven empresa oleica cuyo propósito es ensalzar las especies autóctonas y únicas del Somontano.


Son tan pocos los olivos supervivientes que por eso se consideran en peligro de extinción, ya que solo se encuentran en esa zona de la comarca.


"Este aceite gourmet mima las olivas desde su nacimiento para recogerlas temprano, en el mes de noviembre, ya que así el fruto guarda mejor sus propiedades y su sabor es mucho más intenso", aseguran los responsables de la empresa.


Recién cogidas se llevan a la almazara de Bierge para molerlas en frío. El resultado es un aceite con mucha personalidad, como la tierra a la que pertenece.


Aceites Alía nació la campaña aceitera 2013-2014 y su primera propuesta fue un monovarietal de verdeña, otra oliva autóctona de la comarca, que compitió en Nueva York con algunos de los mejores aceites de oliva virgen extra del mundo en el New York Olive Oil Competition.


Ir al suplemento de gastronomía