La Cámara de Cuentas recomienda al Inaem mayor control en la gestión de ayudas

Observa debilidades y dice que las subvenciones concedidas ?deberían publicarse en el BOA.

La Cámara de Cuentas recomienda al Instituto Aragonés de Empleo (Inaem) mayor control de los órganos gestores de subvenciones, en las que observa debilidades, y un uso más restrictivo del procedimiento negociado sin publicidad de la contratación pública.


La Cámara de Cuentas de Aragón presentó este jueves a las Cortes de Aragón y al Inaem el informe de fiscalización de la entidad de los años 2012 y 2013.


Se trata del primero de los once informes emitidos por la Cámara de Cuentas en relación con las Cuentas Generales de la Comunidad de esos dos ejercicios, con el fin de ofrecer el material analizado de una forma pormenorizada.


Además del Inaem, los informes emitidos por la Cámara se centran en los departamentos de la administración, el Salud, el IASS, el IAJ, entidades de derecho público, fundaciones, consorcios y sociedades mercantiles integradas en la Corporación empresarial pública de Aragón y en la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión y otro global sobre toda la Comunidad Autónoma.


En el caso concreto del Inaem, la Cámara de Cuentas le recomienda un papel más activo en el registro contable de sus operaciones y que continúe con el proceso de regularización iniciado en el ejercicio de 2012 en aras a reflejar la imagen fiel del patrimonio de la entidad.


También la implantación de los procedimientos de control necesarios para que, antes de conceder una subvención, se compruebe que el beneficiario cumple las condiciones de la administración.


En opinión de la Cámara, la cuenta general del Inaem debería recoger el contenido del Plan de Contabilidad Pública de Aragón en materia de subvenciones y transferencias y ofrecer información homogénea en el estado de liquidación del presupuesto y en la memoria.


Incide, asimismo, en que las subvenciones concedidas por el Inaem deberían publicarse en el Boletín Oficial de Aragón en forma y plazo y en que se debería de reforzar el control de los órganos gestores de subvenciones del instituto en varios aspectos.


Entre ellos, la fijación de indicadores de seguimiento y evaluación de resultados en el plan estratégico de subvenciones del Departamento de Economía y Empleo, el análisis de concurrencia de ayudas en un mismo beneficiario o el establecimiento de penalizaciones a aquellos beneficiarios que incumplen los objetivos mínimos de inserción establecidos en las concesiones de las ayudas.

Propone también que se exija a los beneficiarios memorias de ejecución más claras y detalladas en las que se expliquen los recursos empleados y las funciones desarrolladas en su caso.


El informe de fiscalización de la Cámara de Cuentas de Aragón sobre los ejercicios 2012 y 2013 del Inaem presenta 54 conclusiones en las que asegura que las cuentas no tienen una memoria justificativa del coste y rendimiento de los servicios públicos y la memoria del grado de cumplimiento de los objetivos programados, al tiempo que refleja que en la memoria de las cuentas anuales están incompletos algunos estados contables y otros documentos exigidos por el Plan de Contabilidad de la Comunidad.


Según las conclusiones, las subvenciones se conceden de forma directa en varias líneas que han sido objeto de fiscalización y, en la mayoría de los expedientes no se incluyen informes o memorias en los que se justifique su excepcionalidad y la imposibilidad de aplicar el procedimiento ordinario de concurrencia competitiva.


La Cámara de Cuentas concluye además que el plan estratégico de subvenciones aprobado por el departamento de Economía y Empleo no especifica los planes concretos de acción, los objetivos a alcanzar ni los indicadores de seguimiento por líneas de ayuda, y que los resultados obtenidos tampoco se han sometido a evaluación y control, por lo que incumple su cometido como instrumento de planificación.


Según han informado fuentes parlamentarias, el Inaem formuló 48 alegaciones a los resultados provisionales de fiscalización, de las que nueve se han considerado, catorce han sido estimadas total o parcialmente y veinticinco no han sido desestimadas.