EN LA CONTRA

José Luis Melero: "Ser del Real Zaragoza es una actitud ante la vida"

Escritor, bibliófilo, consejero del Zaragoza

José Luis Melero.
José Luis Melero: "Ser del Real Zaragoza es una actitud ante la vida"
josé carlos león

Como proselitista de Zaragoza, le suponía de secano: no esperaba dar con sus huesos junto al mar.

Salou es el mar de los zaragozanos. El paseo de las Palmeras de Salou es como el paseo de la Independencia de Zaragoza. Encuentras a la gente que quieres ver. Desde luego, si quisiera pasar desapercibido, no vendría aquí, al lugar de descanso preferido de los aragoneses.

 

No creo que tuviera mucho futuro como espía. Eso de pasar desapercibido no va con usted: en toda parte pregona su aragonesismo.

No tengo nada que ocultar. Digo lo que pienso y siento. Ejerzo de aragonés allá donde voy y estoy. Además, procuro extender mi pasión aragonesista en todos los campos que alcanzo.

En cierto modo, es un sentimiento, una forma de ser.

 

Siendo muy joven fundamos el Rolde de Estudios Aragoneses. Apenas llevaba una año en la universidad. Entré en el año que mataron a Carrero.

Ya ha llovido, Pepe.

Desde mediados de los setenta se han publicado 150 libros, además de 140 números de la revista Rolde. Lo hemos realizado con gente de todas las tendencias, y siempre con Aragón como referencia primera. No hacemos política. Nuestro compromiso es aragonesista. No se puede amar lo que no se conoce. Nosotros luchamos por todos los medios para que se conozca Aragón. Soy el vicepresidente perpetuo (sonríe).

 

Se adivina en usted una pasión por la cultura.

Trabajo en el Registro de la Propiedad. Procuro permanecer en contacto con las corrientes culturales. Creé la revista Crótalo. También participé o participo en proyectos como Criterio Aragonés, La Magia de Aragón y La Magia de Viajar por Aragón.

 

La jota significa otro alimento esencial en su dieta.

Es cierto que soy muy aficionado. Canto relativamente bien, aunque bajito. Desde luego, canto mucho mejor que bailo. También pertenezco al jurado del Certamen Oficial de Jota de las Fiestas del Pilar. Data del siglo XIX. Por allí han pasado los mejores: desde José Oto, pasando por Jesús Gracia, hasta el Pastor de Andorra.

 

Todas estas experiencias las ha plasmado negro sobre blanco.

He escrito una docena de libros. En casa tengo unos de 30.000 libros: más de lo que podría leer en diez vidas. Mi preferido es 'Vida de Pedro Saputo', de Braulio Foz.

 

Su tribu, sin duda, danza alrededor de la literatura.

Suelo quedar con Ignacio Martínez de Pisón, Félix Romeo, José Antonio Labordeta, Ismael Grasa... Cenamos en Casa Emilio. Allí hablamos de todo.

 

También de fútbol.

Sobre todo, del Real Zaragoza. Voy al futbol desde los tres años. Los Magníficos me educaron sentimentalmente. Mis ídolos eran Yarza y Violeta, que fue mi vecino y es y será siempre mi amigo.

 

A veces, con lo que uno observa e intuye, cuesta ser zaragocista.

Ser del Zaragoza es una forma de estar en el mundo, es una actitud ante la vida. Es estar con los que no ganan siempre, con los humildes frente a los poderosos, con los tuyos frente a los de fuera. Es una toma de postura. Ser del Real Madrid o del Barça es fácil. Lo nuestro tiene más mérito.

 

También figura como consejero de Agapito.

Soy amigo de Agapito. No me dijo nada de la compra del club. Es más, me quedé flipado cuando lo hizo. Luego, me invitó a formar parte del consejo, un órgano que él pretendía plural, con diferentes sensibilidades. Represento al aficionado. Aunque algún día volveré a la grada, ahora me encontro a gusto allí.

 

Tengo entendido que se reunían, más o menos, una vez al año...

El propietario tiene el 98% de las acciones. El consejo es consultivo y deliberativo; no ejecutivo. Agapito es el dueño.

 

O sea, me temo que los consejeros pintan menos que...

¡El Pichorras en Pastriz!

 

Me lo ha quitado de la boca, Pepe.

No es así. Se han hecho cosas mal, pero también se hacen cosas bien. Me gustan los fichajes. Pennant y Uche me encantan. Van a llegar más. Vamos a ser competitivos.