Recibimiento de primera a la vuelta de Gerona este domingo

Recibimiento de primera para un equipo lanzado a Primera. Minutos antes de la medianoche de ayer, la estación de Delicias estalló de alegría en una recepción al equipo aragonés sin precedentes inmediatos. Más de 2.000 seguidores abrazaron a la expedición zaragocista, que volvió a Zaragoza desde Gerona vía AVE. Hay que rebobinar mucho en la memoria para hallar un gesto de cariño semejante. "Es increíble, esta afición se lo merece todo. Hay que estar aquí dentro para verlo. Es una afición de Primera", dijo Mario Abrante mientras intentaba subir al autobús. Detrás de él ingresó como pudo en el autóbús que desplazaría a la expedición hasta el club el técnico Ranko Popovic. El más aclamado fue el canterano Vallejo, que tampoco tuvo sencillo el acceso al vehículo entre los abrazos de los aficionados.

La inmensa manifestación de cariño arrancó una hora antes de la hora programada para la llegada (23.35). Poco después de las 22.30 ya había decenas de aficionados en la zona de llegadas de Delicias. A las 23.00 ya eran centenares los que cantaban sin cesar el himno del Real Zaragoza. Los cánticos "Sí se puede" y "Volveremos a Primera otra vez" también reverberaban en la estación. Entre los cánticos seguían y seguían llegando zaragocistas. A las 23.15 ya se superaba con holgura el millar. Entonces comenzaron a surgir los problemas de seguridad para frenar la euforia zaragocista. A la seguridad privada de la estación se le agregó la Policía Nacional para hacer pasillo a la expedición, y posteriormente la Policía Local para acompañar al autobús.

"La gente tiene unas ganas enormes de ver al Zaragoza en Primera División. Estoy seguro de que se va a llenar La Romareda el miércoles y que le vamos a ganar al Las Palmas", aseguró José Vicente Casanova, presidente de la Federación de Peñas. Llegaron seguidores hasta en silla de ruedas, como Víctor Marcén, jugador de tenis en silla de ruedas y seguidor extasiado del Real Zaragoza. "Lo hemos merecido. El Zaragoza ha pasado la eliminatoria porque ha tenido fe. Y estoy seguro de que vamos a ascender", señaló sonriente.Minutos de espera

Hubo unos minutillos de demora, hasta que aparecieron los jugadores, los técnicos, el Consejo de Administración y acompañantes. El zaragocismo reventó el umbral de monotonía de decibelios. ¡Por fin hay algo que celebrar! La Policía se las veía y se las deseaba para poder frenar el ímpetu, las ganas enormes de los aficionados de abrazar a sus ídolos, de hacerse fotos con la nueva ilusión zaragocista encarnada en estos hombres. Entre los abrazos, entre los festejos, los cámaras intentaban capturar unas imágenes que hace tantísimo tiempo no se disfrutaban en Zaragoza. Los jugadores, los técnicos y los directivos accedieron como pudieron al autobús entre un grito ensordecedor, unánime, de respaldo al Zaragoza. Los programas deportivos de las cadenas nacionales de radio plasmaron lo que estaba sucediendo en Zaragoza. Futbolistas del equipo aragonés abrieron esos programas anoche. Y eso que no hemos ascendido... todavía. Ayer fue recibimiento de primera. El próximo domingo será recibimiento de Primera.