real zaragoza

El estreno de Julio Velázquez en el Real Zaragoza: el cambio sin cambio

El equipo mejoró algo su actitud e intensidad en Albacete, pero no el juego. Faltaron argumentos futbolísticos, sobre todo en ataque.

ALBACETE B. vs R. ZARAGOZA, LIGA 2023-2024 [[[PRENSA2]]] [[[FOTOGRAFOS]]]
ALBACETE B. vs R. ZARAGOZA, LIGA 2023-2024 [[[PRENSA2]]] [[[FOTOGRAFOS]]]
Prensa 2

Ni fútbol, ni ataque. Todo sigue (casi) igual en el Real Zaragoza. Todavía es pronto para juzgar a Julio Velázquez, pero su estreno fue más que decepcionante. Las buenas intenciones adelantadas en su presentación –aquello de ser proactivos y jugar en campo contrario– quedaron en eso. Apenas se intuyó influencia del nuevo entrenador; los aspectos que no han cambiado eclipsaron a los que sí.

Sobre todo, esa incapacidad para generar juego ofensivo, pues el Real Zaragoza no chutó entre los tres palos hasta el minuto 84, con una ocasión de Sergio Bermejo que, según las palabras del propio Velázquez en el Carlos Belmonte, pudo haberse traducido en la victoria.

Sí, claro, y por esa regla de tres el encuentro también podría haber quedado sentenciado en la primera parte. Porque el Albacete sí dispuso de varias ocasiones para tomar ventaja en el marcador, valiéndose de su agresividad en la presión y de la verticalidad tras robo.

Contexto complejo para debutar en cualquier banquillo. Todo transcurrió muy deprisa. A la velocidad que marcan los equipos trabajados. Al ritmo que quisieron los manchegos y que sobrepasó a este Real Zaragoza, en reconstrucción, de principio a fin.

Rubén Albés anuló a Velázquez. Directamente, nos quedamos sin ver el estilo que pretende el salmantino. La mejora más significativa se vio en la forma de afrontar los duelos individuales, en la intensidad que fue a menos en la segunda mitad.

Con balón, casi nada. La transformación al 4-2-3-1, con Maikel Mesa haciendo de enlace por detrás de Sergi Enrich, no trajo control ni profundidad. Al contrario. Ante la ausencia de un plan determinado, las conducciones de Francho Serrano fueron el único recurso.

El Real Zaragoza de Julio Velázquez pudo ser el de la semana pasada ante el Huesca. O el de la anterior. O el de la otra de antes, cuando Fran Escribá, el iluso de Fran Escribá, seguía confiando en que una victoria lo cambiase todo.

Semana clave

Pues sigue sin llegar. Ni la victoria, ni el cambio. Y lo peor es que ya no se sabe qué urge más. Porque la zona de Promoción de ascenso empieza a quedar lejos, demasiado lejos, y el equipo aragonés sigue cerca de su peor versión.

Si es cierto que Velázquez había visto todos los partidos del Real Zaragoza esta temporada, lo sabrá mejor que nadie… Se viene una semana clave para recuperar jugadores –a ver cómo evolucionan los lesionados Iván Azón y Quentin Lecoeuche, que este sábado tuvo que retirarse con molestias y podría sufrir una rotura en el isquiotibial– e intentar levantar el grupo.

Estos jugadores deben dar mucho más, y con la actitud no basta. Hace falta más fútbol. Argumentos dentro del campo para después no tener que pedir disculpas fuera, por enésima vez, a los seguidores que recorren miles de kilómetros por este escudo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión