Manu Lanzarote es definitivamente historia en el Real Zaragoza. Después de más de un mes de tirantes relaciones entre el jugador, la dirección deportiva que encabeza Lalo Arantegui y, por extensión, los dirigentes de la SAD, en las últimas horas de este sábado firmaron un acuerdo amistoso por el que se consuma su desvinculación de la entidad zaragocista. Este era el deseo del club desde que la liga anterior finalizó a principios de junio. Pero el futbolista, que había renovado por un año más automáticamente a través de una cláusula por partidos jugados durante el torneo, enseguida advirtió de su intención, bien de quedarse ese año más en Zaragoza o bien de cobrar las cantidades pactadas si el club decidía prescindir de él sin atender a ese compromiso, una cifra de alrededor de 250.000 euros.

Desde el inicio de la pretemporada, cuando Lalo comunicó a Lanzarote que tenía vacaciones indefinidas y que debía buscar una salida para abandonar el Real Zaragoza, esta resolución de ruptura en el caso que se discutía estaba escrita tarde o temprano. Han pasado cinco semanas de tiras y aflojas, hasta que el futbolista, tras forzar al máximo la situación, ha observado que ya no merecía más la pena alargar el litigio. Un asunto de índole laboral y deportiva que, además de entorpecer los planes de la SAD de cara al futuro inmediato, pues el cierre de la plantilla depende directamente de la salida de los jugadores descartados, también va en su perjuicio de ellos mismos, en términos deportivos: además del ya resuelto asunto de Lanzarote, en la misma situación siguen aún Irureta, Barrera, Bedia y Xumetra.

Con la marcha amistosa de Lanzarote, el Real Zaragoza se ahorra parte del salario que iba a cobrar el jugador en la campaña que está próxima a comenzar, los referidos 250.000 euros. Y por ello, gana techo salarial dentro del control de la LFP sobre su presupuesto global. Mallorca, Reus y el fútbol indio son las ofertas que maneja Lanzarote para elegir su nuevo destino.

Desde el 30 de enero de 2016 hasta el 12 de agosto de 2017 ha pertenecido Lanzarote al Real Zaragoza. Eso sí, con un breve espacio de 20 días en el verano pasado, en el que estuvo en el limbo, supuestamente buscando acomodo en un equipo de Primera División, hasta que Narciso Juliá, el director deportivo entonces, retomó su contratación después de haberse descartado a la conclusión de la anterior liga.

Han sido casi 19 meses de relación en los que el catalán ha sido pieza clave en el entramado táctico del Real Zaragoza. Atrás deja, en lo positivo, 12 goles, 12 asistencias y una zurda de seda, tal vez la mejor de toda la Segunda División. Pero, en contraposición, Lanzarote se va abollado por su irregularidad y por su singular carácter, dentro y fuera del campo (vio 17 amonestaciones, 15 de ellas por protestar), que nunca le ayudó. El extremo jugó 3.775 minutos con el Real Zaragoza en 52 partidos.

Datos estadísticos de Lanzarote en el Real Zaragoza:

Temporada 2015-16

16 partidos

1.197 minutos

5 goles

8 asistencias

10 tarjetas amarillas

Temporada 2016-17

36 partidos

2.578 minutos

7 goles

4 asistencias

7 tarjetas amarillas