Amenaza de tormenta en la defensa del Real Zaragoza

José Enrique y Marcelo Silva, dos de los puntales titulares de la defensa de César Láinez desde su llegada al primer equipo el 26 de marzo, afrontan las cinco últimas jornadas de liga, las decisivas, advertidos de sanción. En Reus, los dos centrales del Real Zaragoza (a José Enrique, Láinez lo ubicó ahí desplazándolo desde el lateral zurdo) vieron la cuarta tarjeta amarilla de sus respectivos ciclos de castigo, que en el caso del uruguayo es ya el tercero.

De este modo, al entrenador aragonés le asoman nubarrones de tormenta en la línea defensiva de cara a los últimos duelos de la competición liguera, pues son justamente los centrales los más proclives a ser amonestados, por motivos obvios, a lo largo de un torneo. De ver José Enrique o Marcelo Silva una nueva amonestación, se perderán el siguiente partido. Y Láinez tendrá que tener preparado el comodín (o, en plural, los comodines). Con Jesús Valentín, o el regreso de Cabrera -ahora lateral izquierdo- al eje de la zaga, o incluso Feltscher como candidatos a improvisar una nueva formación del dispositivo de contención en cualquier momento.

Por esto, también es importante que el Real Zaragoza venza este viernes al Cádiz en La Romareda (21.00), alcance los 49 puntos y, según se den los resultados de los demás implicados en la pelea por el descenso a Segunda B, pueda acercarse a la salvación cuanto antes. De no ser así, además de los propios números insuficientes y de los riesgos que asomarían en el camino, habría que prever problemas de alineación en cualquier partido decisivo de los que restan por culpa del cúmulo de tarjetas que afecta a estos dos defensas.

Del resto de amonestados en Reus (el granadino López Amaya enseñó 8 tarjetas amarillas y una roja al Real Zaragoza, récord negativo de la temporada), solo el caso de Zapater presenta asimismo un grado de peligro a corto plazo. El ejeano, que está jugando todo y solo había visto 2 cartulinas durante el curso, acumuló la tercera en el campo reusense. Todavía no está en el corredor de la sanción, pero a falta de cinco jornadas, y en su rol, estos partidos decisivo ocultan peligros indirectos de este tipo.