Agné y cómo hacer del vídeo un arma teórica útil

Este lunes feliz tras la victoria ante el Mirandés, la semana ha comenzado, una vez más con una sesión de vídeo. Lunes, 10.20 de la mañana, y Raúl Agné ya tenía preparado otro largometraje de los suyos. Ya son famosos los vídeos del técnico de Mequinenza entre la plantilla. De récord de duración. Ningún jugador del actual Real Zaragoza había pasado jamás tantas horas sentado delante de una pantalla viendo con sumo detalle sus acciones, sus aciertos, sus errores, el modo con el que jugar al rival de turno.

El equipo ha llevado a cabo una suave sesión de recuperación tras la victoria contra el Mirandés

Cabrera, la voz del vestuario en esta jornada de alegría en todo el zaragocismo por el buen partido desarrollado ante el complicado rival burgalés, habló de este asunto con la sonrisa pintada permanentemente en su cara. Los vídeos de Agné son ya parte de la historia del Zaragoza. Un mecanismo directo para inocular la parte teórica de su libreto lo más rápidamente posible en los cerebros de su plantilla.

“Los hechos están ahí. Está funcionando bien. Esta semana pasada, por ejemplo, analizamos mucho y en profundidad al rival, el Mirandés, porque es un equipo atípico, con una formación que no todo el mundo utiliza. Y lo analizamos muy finamente. Y creo que nos sirvió de mucho para ganarles. El míster nos hizo tres o cuatro sesiones de vídeo… igual me quedo corto”, razonó Cabrera con aire jocoso.

Son lecciones audiovisuales que rondan la hora de duración: 57, 45, 50 minutos, dedicó Agné en los pases privados que sus colaboradores editan para que el de Mequinenza explique con detalle los modos con los que se han de afrontar los partidos y, por contraposición, los errores que no desea que se repitan.

Exite una teoría, al respecto, que dice que un vídeo deja de ser efectivo para un equipo cuando sobrepasa los 12 o 15 minutos. Que, muchos jugadores de las plantillas, acaban dispersándose en las explicaciones a oscuras en una sala de proyección cuando el vídeo en cuestión se alarga más de ese tiempo. A Agné, es una evidencia, esta tesis no le convence. De hecho, actúa bien al contrario de ella.

“Si las cosas se hacen de un modo y dan resultado, se convence al jugador. Mientras haya resultados positivos, y por ahora el vídeo está sirviendo para ganar, por mí, que haga dos horas cada día”, añadió Lele Cabrera sonriente haciendo referencia a los ya acuñados largometrajes de Agné. Al acabar la rueda de prensa, aguardaban otros 55 minutos de cine. Era el repaso a lo hecho contra el Mirandés. Lo bueno y lo malo. Todo un aprendizaje, todo un método.