baloncesto

Casademont Zaragoza: otra Copa para el recuerdo

El Casademont Zaragoza agranda su prestigio tras la conquista del subcampeonato en Huelva, en la última edición de la Copa de la Reina. La amplia derrota en la final no desacredita su notable torneo. 

Tanaya Atkinson (Casademont Zaragoza) intenta anotar ante la presencia de Awa Fam (Valencia Basket) en la final de la Copa.
Tanaya Atkinson (Casademont Zaragoza) intenta anotar ante la presencia de Awa Fam (Valencia Basket) en la final de la Copa.
Alberto Nevado/FEB

No sólo importa el resultado; en el deporte existen valores muy estimables que dignifican al equipo incluso en la derrota: el compromiso, el coraje, el carácter, el orgullo, la tenacidad, el sacrificio, el pundonor, el espíritu solidario... El Casademont aplicó nuevamente esas máximas en Huelva, en la reciente edición de la Copa de la Reina, y abandonó la cita con la cabeza alta y el prestigio engrandecido. Finalizó el torneo como subcampeón, después de haber eliminado al Baxi Ferrol (75-49) en el partido de los cuartos de final, y tras haber sorprendido en las semifinales al Perfumerías Avenida (61-73) –el equipo más laureado de la competición, con 10 títulos conquistados–.

En el choque definitivo, el cuadro aragonés nada pudo hacer ante la superioridad del Valencia Basket (77-53), el actual campeón de la Liga Femenina, que gobernó la contienda de principio fin: inició el despegue en los primeros compases del duelo, y después, agarrado al acierto ofensivo de Leticia Romero (19 puntos) y Alina Iagupova (17), no dio opción alguna a la remontada. 

Siempre a remolque, obligado a una desgaste superior, el Casademont también acusó el cansancio acumulado durante todo el torneo: disputó tres encuentros en apenas 36 horas, y llegó exhausto a la final; ningún otro equipo estuvo sometido a tanta erosión física como las zaragozanas. El calendario le resultó especialmente adverso en este sentido.

En cualquier caso, la derrota ante el Valencia –amplia y concluyente– ni mucho menos desacredita el torneo del conjunto aragonés, que, salvo en la final, volvió a exhibir una capacidad competitiva formidable. El conjunto de Carlos Cantero inició su participación el pasado viernes, ante el Baxi Ferrol, en la que fue la última eliminatoria de los cuartos de final. El duelo comenzó a las 20.30. Y se impuso con autoridad, sin sobresaltos (75-49), en un partido que dominó con mano firme desde el primer minuto de juego. 

Petra Holesinska, con 17 puntos y un elevado acierto desde el perímetro –anotó 4 de sus 5 lanzamientos triples–, fue la máxima anotadora del encuentro. También brillaron Tanaya Atkinson (13 tantos y 5 capturas) y Aleksa Gulbe (15 puntos), al margen de Mariona Ortiz, quien de nuevo impartió un curso maravilloso de baloncesto (8 asistencias).

Después, sin apenas tiempo de descanso –sábado, 15.00–, al cuadro aragonés le sobrevino el duelo de las semifinales. Y, pese a todas las dificultades, arrolló al Perfumerías Avenida (61-73) en lo que supuso una nueva hazaña de las zaragozanas. De hecho, el equipo salmantino se había presentado en 11 de las últimas 12 finales de la Copa, y acudió al careo en su mejor momento de la temporada:lidera la Liga Femenina, con un 21 triunfos en los 25 encuentros disputados.

Una semifinal sin mácula

Todo eso superó el Casademont, que además se impuso a su adversario con una actuación colosal. Especialmente brillante resultó el primer acto, donde las aragonesas edificaron una renta de 17 puntos (7-25) en el marcador, tras mostrar una superioridad manifiesta en los dos lados de la pista. Al descanso, el Perfumerías Avenida había sumado sólo 26 puntos (26-43), un diáfano indicador de la fortaleza de las aragonesas en las labores de contención.

Christille Diallo resultó incontenible para sus oponentes, con 16 puntos y 5 rebotes en los 20 minutos que permaneció sobre la pista; Mariona Ortiz volvió a sumar en todas las facetas del juego (11 tantos, 7 capturas y 3 asistencias); Aleksa Gulbe fue un azote permanente en el juego interior (13 puntos y 4 rebotes); y Leo Fiebich sumó 15 tantos, con un sensacional acierto (3 de 5) en los lanzamientos triples.

En la primera semifinal –que comenzó a las 12.00–, el Valencia había derrotado al Estudiantes (77-50) con facilidad. El partido del Casademont finalizó cerca de las 17.00. Ycon menos de 20 horas de descanso, el equipo de Carlos Cantero luchó por el título contra las levantinas, en un duelo programado para el domingo a las 12.30. No llegó a competir.

Un título para la historia

En la anterior edición de la Copa, el Casademont había conquistado el título, contra todo pronóstico, tras haber superado al Valencia Basket y al Perfumerías Avenida, los dos obstáculos más elevados del baloncesto nacional. Y lo hizo en un escenario supremo: en el pabellón Príncipe Felipe y ante la presencia de 10.800 espectadores, lo que supuso el récord de asistencia en la historia de la competición. Entonces, al abrigo de su entusiasta afición, el equipo zaragozano remó siempre con tenacidad, sin tregua, con una fortaleza mental admirable, para poder culminar con éxito –y con justicia– su laborioso recorrido hacia la gloria.

Para consumar aquella gesta, el equipo de Carlos Cantero tumbó primero al Araski (71-50), en la eliminatoria de los cuartos de final, en un duelo marcado por el sobresaliente desempeño defensivo de las aragonesas –dejaron a su rival en el medio centenar de puntos anotados–. Además, el cuadro aragonés se agarró en ataque al dominio de Keisha Gatling bajo los aros (19 tantos y 9 rebotes), y a la amenaza de Leo Fiebich en la línea exterior (17 puntos, después de haber convertido 5 de sus 6 lanzamientos triples).

Posteriormente, el Casademont derribó todos los pronósticos en las semifinales: superó al Valencia Basket (59-74), tras sobreponerse a una desventaja de 14 puntos. El cuadro zaragozano nunca dejó de creer, y acabó encontrando su justa recompensa: arrolló a su oponente, con un parcial de 18-0 en la recta final, para plantarse por primera vez en su historia en la final del torneo. 

Vega Gimeno, con 6 triples anotados –4 de ellos en los instantes decisivos–, lideró la remontada. En la faceta ofensiva, el Casademont también dispuso de otras amenazas: Fiebich aportó 16 tantos, 8 rebotes y 4 asistencias, y Tate sumó 11 puntos.

Y en la final, el equipo zaragozano también compitió con seguridad y convicción, pese a medirse con el gran dominador del torneo. El Perfumerías Avenida se presentaba a la cita como indiscutible favorito por historia, presupuesto, plantilla e idiosincrasia. El Casademont, sin embargo, sorteó cada una de las adversidades. Ni siquiera la expulsión de su capitana, Vega Gimeno, le hizo desaparecer de la escena; al contrario, el Casademont supo reaccionar (55-51) y facturó un triunfo para la historia.

El equipo aragonés se había estrenado en la Copa en 2022, aunque entonces no lo hizo como cabeza de serie: cedió en la eliminatoria de cuartos, frente al Valencia Basket (65-55), penalizado por su falta de puntería en los primeros compases de la reanudación (7 puntos anotados en todo el tercer acto). Desde entonces, el Casademont ha sumado un título y un subcampeonato. Más motivos de orgullo para un equipo ejemplar.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión