ciclismo

Zaragoza flipa viendo "volar" al pelotón de la Vuelta Ciclista femenina

El cierzo ha roto una etapa con final en la capital aragonesa. La avenida de Cesáreo Alierta se ha llenado de aficionados que han disfrutado con la victoria de Faulkner. 

Cómo volaban las bicis por Cesáreo Alierta… Qué llegada más bonita -¡y rápida!- la vivida este miércoles en Zaragoza, con el pelotón de la Vuelta Ciclista femenina atravesando una de las principales avenidas de la ciudad. Ante cientos de aficionados. Hasta alcanzar la línea de meta entre vítores y aplausos, como muestra de reconocimiento a unas corredoras que han completado la etapa más larga de la ronda, con 142 kilómetros que han transcurrido entre Molina de Aragón (salida) y la capital aragonesa, pasando por Daroca, Cariñena o María de Huerva.

El cierzo ha azotado con fuerza, como estaba previsto, en una jornada de abanicos. Velocísima por ese viento que ha soplado de costado desde el inicio. Y más dura de lo que anunciaba su perfil llano, puesto que los cortes han marcado la etapa hasta el final, en el que se ha impuesto la estadounidense Faulkner, con Baker y Vos en segundo y tercer lugar.

Todas ella coincidían en el “fantástico ambiente” de la llegada. “Ha sido un día intenso, muy rápido, en el que la estrategia ha sido clave. Hemos sabido leer la carrera a la perfección”, decía la ganadora mientras era abrazada por sus compañeras del Education First antes de la entrega de premios, que también ha tenido lugar en esa avenida de Cesáreo Alierta. 

Allí se han congregado aficionados al ciclismo de distintos puntos de la Comunidad. Roberto Prieto y su hijo Alberto han venido desde Fuentes de Ebro. Fran y su esposa, Carla, desde Alcañiz. Y también los había oscenses, a pesar de que la etapa de este jueves irá desde su capital hasta Jaca, previo paso por el alto del Monasterio de San Juan de la Peña.

Allí se podrá ver a las corredoras a menos ritmo. Y es que, tal y como comentaban algunos de los asistentes a esa llegada en Zaragoza, lo de aquí ha sido un visto y no visto. “Van Volando”, señalaba la alcaldesa Natalia Chueca, antes de ese desenlace en el que, sorprendentemente, no ha habido esprint.

Faulkner venía con ventaja. Aquí creo que el viento no era tan favorable, pero aun así la velocidad era flipante”, comentaba Carlos Lasala, otro de los aficionados que se encontraba en las proximidades de la línea de meta. “Es fantástico ver cómo llegan a pesar de todo el esfuerzo previo”, añadía Diego Linares, entre el bullicio del gentío y del ‘speaker’ que informaba de los resultados de una jornada que quedará en la memoria de los locos del ciclismo.

La Vuelta femenina ha finalizado hasta en 49 ocasiones en Zaragoza, pero pocas carreras fueron tan decisivas como esta. Puede decirse que el cierzo, tan propio de esta tierra, ha roto el pelotón. La clasificación queda marcada por lo vivido este miércoles. Y mañana jueves se esperan emociones fuertes por el Alto Aragón…

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