baloncesto

Cukurova Mersin-Casademont Zaragoza: 40 minutos para soñar con la 'final four' de la Euroliga

Carlos Cantero advierte de que habrá un "ambiente hostil" porque las turcas querrán ganar "por lo civil o lo criminal".

Partido Casademont Zaragoza-Cukurova Mersin, de la Euroliga femenina, en el pabellón Príncipe Felipe
Una imagen del Casademont Zaragoza-Cukurova Mersin, en el Príncipe Felipe
Francisco Jiménez

No es exagerado decir que el de hoy es uno de los días más importantes en la historia de Basket Zaragoza. Como ayer afirmó la capitana Vega Gimeno, "el sueño europeo es compartido" y los dos Casademont, femenino y masculino, lucharán esta tarde por avanzar en sus eliminatorias continentales.

Apenas 40 minutos separan al equipo de Carlos Cantero del sueño de alcanzar la ‘final four’ de la Euroliga. Eso sí, el reto es mayúsculo porque se la juegan esta tarde (17.30) ante un equipo tremendamente competitivo, el Cukurova Mersin, y en una pista que se convertirá en una olla a presión y en la que la afición turca no es conocida, precisamente, por su ‘fair play’.

"Me espero muchas cosas que no van a estar de nuestra mano. No sé el tipo de arbitraje que vamos a tener, no sé el ambiente que viviremos, pero todos hemos visto situaciones en años anteriores como el tirar botellas a jugadoras al campo. Es algo que nadie quiere vivir, espero que la seguridad sea la adecuada", decía el entrenador Carlos Cantero, preparado para la encerrona en Turquía.

De hecho, las tretas del rival comenzaron ya poco después de que Casademont desembarcara, tras más de once horas de viaje, en la ciudad de Mersin. El equipo tenía previsto entrenar ayer por la mañana en el pabellón Servet Tazegül, pero el Cukurova le denegó el acceso. Por normativa, los equipos no están obligados más que a dejar la pista para dos entrenamientos –el completado ayer por la tarde y otro esta mañana–, pero hace quince días no hubo problemas para atender la solicitud de un tercero, tal y como habían acordado los clubes y tal y como se hizo también en Zaragoza la semana pasada. Las formas y la elegancia no deberían estar discutidas con la rivalidad en la cancha...

Así las cosas, Mariona Ortiz, Leo Fiebich y compañía tuvieron que hacer de la necesidad virtud ayer por la mañana y acabaron entrenando en la playa más próxima al hotel. Una breve sesión de activación sobre la arena sirvió para que las jugadoras pudieran estirar y despojarse del cansancio del exigente viaje, antes de tomar contacto con la cancha y los aros por la tarde.

Vega Gimeno, un día antes de la trascendental cita, era optimista: "Ya lo dije en el Príncipe Felipe, si hemos venido hasta aquí es porque queremos llevarnos la eliminatoria, así que vamos a por todas", dijo ayer la capitana en un vídeo compartido en las redes sociales. Cantero, tras la excelsa victoria por 57-56 lograda hace una semana en Zaragoza, decía: "Yo ya me considero ganador, podemos ir a Turquía y que nos eliminen, pero no nos van a quitar lo que ya hemos logrado. Pase lo que pase, no tendremos sensación de fracaso ni de frustración". El entrenador es consciente de que el Cukurova es claro favorito y, precisamente, es esta presión con la que jugará el equipo turco lo que puede dar opciones al Casademont: "Ellas están obligad a ganar, por lo civil o por lo criminal", opina el míster, para quien la clave será intentar que emerjan las dudas de las rivales y procurar algunos parciales favorables como sucedió en su último choque.

Para este tercer y definitivo encuentro de la serie de cuartos de final, Cantero podrá contar con toda su plantilla, aunque algunas jugadoras no llegan en las mejores condiciones físicas. Es el caso de Tanaya Atkinson, que ni siquiera se desplazó a San Sebastián para disputar el partido de la competición doméstica contra IDK, o de Christelle Diallo, que guardó descanso porque hoy tendrá que luchar –y mucho– en la pintura.

La amenaza ofensiva del Cukurova es de sobra conocida y su plantel está repleto de grandes nombres. Sin ir más lejos, Marina Mabrey –la que provocó a la grada del Felipe con sus aspavientos– es una de las máximas anotadoras de la categoría con 18,9 puntos de media. Las turcas, además, hicieron dos auténticos fichajazos de última hora para enfrentarse al conjunto aragonés como fueron Kahleah Copper (campeona de la WNBA) y Stephanie Mavunga. Ambas están respondiendo con de 18,5 y 14,5 puntos respectivamente por encuentro. Entre las tres suman la mayor parte de la anotación de un equipo, que –no olvidemos– es el actual subcampeón de Europa.

Casademont tendrá que jugar con intensidad, ponerse el traje de faena en defensa y estar fino en ataque para plantar batalla en tierras otonamas, donde hace quince días cayó por 79-62. En la vuelta, en Zaragoza y con una ‘marea roja’ volcada, las de Cantero consiguieron igualar la eliminatoria con un apurado 57-56, lo que habla muy bien de un esfuerzo defensivo casi propio de los Sitios: entre Mabrey, Mavunga y Copper anotaron 41 puntos mientras que el resto de jugadoras (y participaron siete) solo lograron 15.

El partido de hoy puede salir cara o puede salir cruz, pero lo cierto es que pocos (o nadie) pensaban que a estas alturas el debutante Casademont aún seguiría vivo en la máxima competición continental. Eso ya es un premio y, ojo a lo que pase hoy, porque este equipo es capaz de todo...

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión