El Pamesa Teruel Voleibol se estrena en Europa con el reto de dejar atrás su mala racha liguera

El Pamesa Teruel Voleibol se estrena esta temporada en Europa con su visita a la cancha del Panvita Pomgrad esloveno para disputar este martes la primera eliminatoria de la Challenge CUP, la tercera competición continental más prestigiosa, tras la Champions y la Copa CEV. Los turolenses aspiran a que la vuelta a un torneo europeo sirva de bálsamo para curar las heridas abiertas tras sendos tropiezos en la Superliga, donde han perdido los dos últimos partidos, uno de ellos frente al colista Emeve de Lugo.

La expedición naranja ha partido este lunes de Teruel con toda la plantilla disponible, incluido el renqueante Mauro Zelayeta, que acaba de recuperarse de una infección vírica que lo dejó fuera de combate.

El entrenador de los turolenses, Maxi Torcello, se ha mostrado convencido de que el equipo puede "recuperar la ilusión" con la Challenge, una competición en la que ya compitió en 2022 y a la que regresa tras el parón de la pasada temporada.

El presidente del Pamesa Teruel, Carlos Ranera, apuesta porque los jugadores "rompan" con la mala racha de resultados de la liga. "Y qué mejor momento para hacerlo que el regreso al escenario europeo", remacha.

Ranera insta a la plantilla a "sacar todo su coraje" para demostrar sobre la pista la "calidad" que atesora. Añade que el choque frente al Panvita Pomgrad de la pequeña ciudad eslovena de Murska Sobota debería servir a los jugadores para dejar patente que "son dignos" de estar en un club como el Pamesa Teruel, que se ha afianzado en la elite del voleibol nacional desde hace más de una década y que dejó buen sabor de boca en su última experiencia europea, en la temporada 2021-2022.

Admite que en las últimas semanas las bajas de algunos de los jugadores fundamentales al estar convocados con sus respectivas selecciones o por problemas de salud –los casos del receptor Mauro Zelayeta y del central Áxel Téllez– han impedido aprovechar todo el potencial del equipo.

El presidente ratificó la confianza del club en el trabajo que desarrolla Maxi Torcello, que "ha demostrado" que es capaz de remontar una situación difícil. Se mostró convencido, no obstante, de que, tras las dos derrotas consecutivas en la liga, Torcello habrá tenido que hacer un trabajo psicológico con sus pupilos para levantar la moral y reforzar su seguridad en la pista.

Un viaje accidentado

Los prolegómenos del choque de Challenge han sido complicados. La expedición turolense no ha podido partir del aeropuerto de Valencia como tenía previsto por la presencia de niebla. Solo cinco de los integrantes de la delegación naranja han podido al fin volar desde la capital levantina, aunque han tenido que hacerlo en un vuelo distinto del previsto.

El resto del grupo –12 jugadores y técnicos– se ha visto obligado a viajar por carretera hasta Madrid, a donde han llegado al anochecer, para desde allí tomar un vuelo a Viena. El equipo eslovaco se encarga de recoger a los naranjas en la capital austriaca para seguir por carretera hasta Eslovenia.

Los contratiempos del desplazamiento añadirán un plus de cansancio a una plantilla que disputó su último partido de liga el pasado sábado frente al potente Guaguas canario. Carlos Ranera se ha mostrado convencido, sin embargo, de que la plantilla estará este martes recuperada físicamente para pelear por la victoria.

Admite que las referencias que tienen los turolenses de su primer rival en el torneo europeo son mínimas. La única pista es muy general y se limita al "buen nivel" del voleibol esloveno. El partido de vuelta de la eliminatoria se disputará en Los Planos el próximo día 29.