Un equipo asimétrico

La efectividad del CAI desde el perímetro, donde presenta uno de los mejores porcentajes de la Liga Endesa, se contrapone con su escasa fiabilidad bajo los aros, donde ha reducido drásticamente sus prestaciones con el discurrir de la competición

Chinemelu Elonu, el último fichaje del CAI Zaragoza, ayer en el pabellón Príncipe Felipe.
Chinemelu Elonu, el último fichaje del CAI Zaragoza, ayer en el pabellón Príncipe Felipe

En sus compromisos más recientes, el CAI se ha distinguido como un equipo asimétrico, en gran medida por los numerosos contratiempos que ha sufrido en su juego interior. Su destreza desde el perímetro, donde presenta uno de los mejores porcentajes de la Liga Endesa, se contrapone con su escasa fiabilidad bajo los aros, donde ha reducido drásticamente sus prestaciones con el discurrir de la competición. Un aspecto que, en las últimas jornadas, ha generado una profunda inquietud en el cuerpo técnico zaragozano. Y que trata de resolver ahora con la contratación de Chinemelu Elonu,el sustituto del lesionado Henk Norel. El nigeriano se estrenó en el partido del pasado domingo, contra el UCAM Murcia, apenas horas después de haberse incorporado a la plantilla aragonesa. Elonu, que participó durante 17 minutos, finalizó la contienda con 4 puntos, 5 rebotes y 5 de valoración; pero no fue capaz de resolver los desequilibrios del CAI Zaragoza en la pintura, que fueron muchos y muy graves.


En este sentido, el conjunto aragonés quedó nuevamente retratado. En sus actuaciones más recientes, su déficit bajo los aros ha sido inquietante, especialmente por su escasa capacidad reboteadora. Sus registros resultan desalentadores:contra el Cajasol, el CAI contabilizó hasta 14 capturas menos que los sevillanos; el Joventut superó a los aragoneses en 8 rebotes; el Unicaja abandonó el Príncipe Felipe, el pasado 20 de abril, con hasta 14 rechaces en el ámbito ofensivo; también el Guipuzkoa, el Real Madrid y el Laboral Kutxa atraparon más rebotes que los aragoneses. Yúnicamente el Estudiantes y el Valladolid sumaron, recientemente, menos capturas que el conjunto de Abós.


Sin embargo, la actuación del pasado domingo resultó especialmente negativa bajo los aros. Los murcianos, que apenas se jugaban el decoro deportivo, superaron permanentemente al equipo aragonés en la pintura, sumando en total hasta 19 rebotes ofensivos. Y eso se traduce en 19 ataques más. Entre los cuatro hombres interiores del conjunto aragonés (Jones, Elonu, Fontet y Sanikidze), sólo aportaron nueve puntos de valoración. "Intenté hacerlo lo mejor posible, pero hay que tener en cuenta que apenas llevaba un día en la plantilla. No obstante, ya he podido observar por qué el equipo está donde está, por qué ha obtenido tan buena clasificación", explica Elonu, la última contratación de los zaragozanos, consciente de la dificultad que conlleva participar en los ‘play off’.


Los desequilibrios del CAI en la pintura, cada vez más evidentes, comenzaron el pasado mes de febrero, recién finalizada la Copa del Rey, con la venta de Giorgi Shermadini al Olympiakos. Su marcha ya dejó a la plantilla sin uno de los mejores pívots del panorama continental. Era la referencia más fiable de los zaragozanos, con un promedio de 12.6 puntos y 6 rebotes por partido, y uno de los jugadores más productivos de la competición.Los altibajos de Norel

Su recambio, Henk Norel, también cuenta con una gran amplitud de recursos, aunque su rendimiento vino lastrado por su largo periodo de inactividad. El holandés permaneció ocho meses lesionado y, aunque venía completando muy buenos partidos, continuaba lejos de su verdadera dimensión. Y, precisamente, cuando había elevado su rendimiento y se acercaba ya a los guarismos del curso anterior, Norel volvió a lesionarse. Sufrió un esguince en el tobillo izquierdo, el pasado 15 de mayo, que le hizo ausentarse frente al Laboral Kutxa y el Murcia, y que también le mantendrá apartado de las pistas durante la celebración de los ‘play off’.


Para suplir la baja del holandés, el club contrató la pasada semana a Chinemelu Elonu, quien ya había actuado en el CAI Zaragoza hace cuatro campañas. "Ahora soy mejor jugador que entonces", confiesa Elonu. Y expone sus argumentos: "Cuando estuve aquí el primer año, solía cometer muchas faltas personales. He mejorado en eso y, sobre todo, también en el conocimiento del juego: cómo moverme sin balón, cómo defender, cómo lanzar en suspensión…", señala el pívot, que dice haber progresado también "en rebotes, en condicionar los tiros del rival y en taponar con facilidad", sus principales virtudes.


Antes de la baja de Norel, el potencial del CAI bajo los aros ya se había visto mermado por la lesión de Jones, operado de la rodilla derecha el 24 de marzo y que, tras la intervención, no pudo actuar en cuatro partidos de la Liga Endesa. El club fichó entonces a McCauley, quien apenas promedió 2 rebotes por partido durante el mes y medio que perteneció a la plantilla.Efectividad en el tiro exterior

Por el contrario, el equipo aragonés supone una amenaza persistente desde el perímetro, un aspecto que domina con mano firme y un acierto devastador. Su porcentaje de efectividad alcanza el 37,34%, cifras que, en toda la competición regular, únicamente ha sido superado por el Valencia (40%), el Laboral Kutxa (39,39%) y el Fuenlabrada (37,34%). De hecho, la plantilla aragonesa cuenta en nómina con algunos de los lanzadores más efectivos de la ACB, como Llompart (44,57%) y Rudez (43,14%), quienes se alinean entre los 10 mejores triplistas de la Liga, además de Stefansson (40%), Tabu (38%) y la versión más reciente de Michael Roll. Contra el Murcia, el CAI finalizó el choque con un 52% de acierto en sus lanzamientos triples, tras convertir 14 de sus 27 intentos. Pero esa efectividad resultó insuficiente para conquistar la victoria, en gran medida por las concesiones ofrecidas en el juego interior.

En el inicio de 2014, el cuadro aragonés exhibió una extraordinaria capacidad competitiva, que se tradujo en siete victorias en ocho partidos. Por entonces, el CAIpresentaba un bloque estructurado, equilibrado, con idénticas prestaciones por fuera y por dentro. Ahora tiene un problema importante en el juego interior, sobre todo por su incapacidad para cerrar el rebote defensivo. Una desventaja considerable contra cualquier oponente, y prácticamente definitiva frente al Real Madrid, el adversario en los ‘play off’.