La jueza de Primera Instancia número 19 ha condenado al exconcejal del Ayuntamiento de Magallón Alberto Bona Gil (PSOE) por intromisión ilegítima en el derecho al honor del exalcalde Víctor Manuel Chueca, también socialista. La magistrada considera que el exedil difundió por el pueblo falsas acusaciones que lesionaron su dignidad y menoscabaron su fama.

La demanda fue presentada por Chueca alegando que en marzo de 2022 comenzaron a sembrar en el pueblo la "infamia" de que maltrataba físicamente a su esposa, unas falsas acusaciones que provocaron un «gran escándalo» en la localidad "perjudicando su buen nombre". En ese momento Alberto Bona era concejal y, en opinión del entonces alcalde, «trasladó a terceras personas la falsedad difundida por el municipio» con el fin de exigir su dimisión.

A pesar de que el demandado lo negó y aseguró que ninguna prueba hay de que hiciera tal cosa, la magistrada entiende que así fue y condena a Bona a indemnizar con 2.500 euros al exregidor y al pago de las costas procesales. La sentencia será recurrida por su abogado, Francisco García Berenguer.

A raíz de estas murmuraciones se desató una crisis política en Magallón que culminó en el pleno del 19 de abril de 2022 con la dimisión de cinco concejales. Posteriormente, renunciarían a su cargo dos más. En declaraciones a este diario, algunos de estos ediles atribuyeron su decisión a razones políticas por "discrepancias" con Chueca sobre la forma de gobernar el municipio y por no contar con ellos para tomar las decisiones.

Sin embargo, el exalcalde achacó las dimisiones a las "insinuaciones" que ya corrían por el pueblo de que era un maltratador y a las que dieron "credibilidad minando su imagen y su nombre". En aquellas fechas, Chueca buzoneó un escrito a todos los vecinos en el que defendía su labor tras veinte años en el cargo y negaba las acusaciones sin llegarlas a concretar. El alcalde continuó gobernando el municipio junto con un grupo de asesores que nombró para hacerse cargo de las concejalías. Pero, a la postre, la crisis desatada tras esos acontecimientos le costó las elecciones y el 28 de mayo de 2023 ganó la alcaldía Aire Nuevo Magallón, con cinco concejales, y el PSOE se fue a la oposición con cuatro, uno de ellos Chueca.

Pero la vida política de Magallón y del exalcalde se verían de nuevo alteradas en diciembre pasado, cuando el nuevo regidor, Esteban Lagota, los cuatro concejales de su partido y la interventora del Ayuntamiento comunicaron a la Fiscalía Provincial de Zaragoza una supuesta serie de irregularidades cometidas por Chueca durante sus mandatos. En el escrito mencionaban desde gastos indebidos de teléfonos, hasta el hallazgo de archivos pornográficos en el ordenador de Alcaldía. Todo esto está siendo investigado por la Fiscalía y todavía no ha concluido si ve o no delito en alguna de las acusaciones. Pero, políticamente, el PSOE suspendió de militancia al Chueca y dimitieron los cuatro concejales magalloneros.

Y, para rematar la polémica, en diciembre pasado se hacía pública una sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Zaragoza que condenaba a Chueca por el acoso laboral que sufrió la directora de la residencia de la tercera edad, a la que cesó a comienzos del verano. La sentencia declaró nulo el despido, obligó al Ayuntamiento a readmitirla y fijó una indemnización de 10.000 euros.