Chueca culpa a la izquierda y llama al club y las instituciones para buscar una solución para La Romareda
La alcaldesa mantiene los plazos de las obras y dice que Zaragoza sigue en la carrera del Mundial 2030
Con un gesto serio después de la decisión del Real Zaragoza de renunciar al proyecto de campo de fútbol, la alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, no ha querido dar la nueva Romareda por perdida. Tras culpar a la izquierda del fracaso de la operación, la máxima responsable municipal ha sostenido que el revés no impedirá que la ciudad tenga un estadio en condiciones ni que pierda la carrera del Mundial 2030.
Por eso, ha hecho un llamamiento a las instituciones y al club para encontrar una solución que permita salvar el proyecto de Cesar Azcárate y los plazos. “Hay que buscar una nueva fórmula para canalizar toda la ilusión que tiene el zaragocismo y la ciudad”, ha dicho.
Para Chueca, el origen del problema está en “las trabas jurídicas y políticas” que ha puesto la izquierda, especialmente Podemos, que con su recurso al Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpta) abrió la espita judicial. Ese procedimiento está hoy pendiente de sentencia definitiva después de que el TSJA rechazara la suspensión del proyecto y permitiera continuar con la tramitación. Para la alcaldesa, “la inseguridad jurídica es la que ha imposibilitado al club obtener financiación para el nuevo estadio”.
“La izquierda ha conseguido paralizar a el proyecto de La Romareda, que no le costaba dinero a los zaragozanos”, ha dicho la regidora, que ha recordado que en varias ocasiones el gobierno municipal advirtió a la oposición de este riesgo. “Hay que hacer una reflexión, porque algunos grupos insistieron y siguieron adelante”, ha declarado.
Pese a la situación, Chueca ha dicho que “no ha cambiado el compromiso de seguir adelante con el proyecto”. En este sentido, ha recordado que ya existe un anteproyecto, el encargado por el Real Zaragoza al equipo de Idom liderado por Azcárate. Ha deslizado que el club “va a seguir avanzando” en la redacción del proyecto y que durante ese tiempo el Ayuntamiento tratará de hallar una salida el embrollo del campo.
“Hay que encontrar una fórmula. Tenemos tiempo”, ha declarado. “El plan B es primero sentarnos a hablar con el club. Necesitamos ponernos a trabajar en los aspectos jurídicos y económicos para hacer realidad el proyecto que está en camino”, ha apuntado. También citó la posibilidad de contactar con las entidades financieras para que se sumen al proyecto.
Para lograrlo, ha dicho que se va a dirigir en primer lugar al club, pero también al Gobierno de España, al de Aragón y a la Diputación Provincial, lo que evidencia que ahora la opción pasa por la aportación de fondos públicos a la construcción del campo.
“En esta nueva etapa apelo a la responsabilidad y al compromiso de todos”, ha dicho Chueca, que también ha hecho un llamamiento al acuerdo del resto de los grupos. “Podemos hacer uin proyecto con consenso político e institucional. A ver si de un problema podemos sacar una solución”, ha concluido.
