Dónde ver mejor las perseidas en Zaragoza: este mapa te ayuda a descubrirlo
La contaminación lumínica afecta a la observación de la lluvia de estrellas, que tiene en vilo estos días a los aficionados a la astronomía.
Mirar a las estrellas es un gesto romántico para los enamorados, curioso para los más pequeños, apasionado para los astrónomos y relajante para quienes aman la naturaleza en todas sus formas. Con las perseidas llorando en honor a San Lorenzo, como buenas lágrimas del Santo oscense que son, es bueno tener controlados los mejores lugares para salir a contemplar esta lluvia de meteoros en su plenitud, pedir deseos o, simplemente, desear que ese buen rato se alargue lo suficiente para ver un montón de ellas.
La contaminación lumínica puede arruinar ese efecto. Es lógico: donde el brillo de la tierra y sus extensiones sea muy alto, el cielo estará igualmente iluminado y será más complicado para el ojo humano ver a las lágrimas de San Lorenzo viajando por el firmamento, encantadas de sobrevolar Aragón de norte a sur y hacer paseos especiales y espaciales por encima de una Huesca que celebra como nadie su llegada. Aunque llevan asomando por el cielo desde hace unos 20 días, es en este fin de semana cuando las perseidas serán más visibles, especialmente en la noche de este viernes 11 al sábado 12, y también la siguiente.
Cómo ver mejor las perseidas
Alejarse de los cascos urbanos, buscar puntos elevados sin árboles que obliguen a estirar demasiado el cuello y con cielos claros, sin nubes, son consejos lógicos. Si se quiere apuntar aún mejor los sitios ideales en el mapa para acercarse y contemplar el cielo estrellado, hay una herramienta que ayuda bastante. Es el mapa interactivo Light Pollution que informa sobre las zonas menos convenientes para desarrollar esta afición de mirar a las estrellas en noches especiales. Cuanto más verde, amarillo y ocre haya alrededor de un punto, peor se verán los meteoros viajeros.
En Aragón, la zona más conflictiva es, lógicamente, la ciudad de Zaragoza y sus alrededores. Los anillos de polución luminosa son mucho más pequeños en las capitales de Huesca y Teruel, y el resto del territorio aragonés está más bien libre de estos colores de polución. En la provincia de Teruel, con la excepción de un mínimo anillo alrededor de Alcañiz, todo el territorio parece perfecto. Lo mismo en Huesca, exceptuando las localidades con más población, como Jaca, Binéfar, Sabiñánigo, Barbastro o Monzón, que tienen no obstante lugares muy cercanos sin rastro de contaminación lumínica. En Zaragoza, quitando a Cuarte y Calatayud, pasa algo parecido.
En Aragón hay identificados muchos puntos idóneos para ver las perseidas
- Pradera de Cantalobos en Montalbán (Teruel)
- Ermita de la Alegría de Monzón (Huesca)
- Zona de acampada de Aliaga (Teruel)
- Monte Jabalón en Jabaloyas (Teruel)
- Embalse de Lanuza (Huesca)
- Praderas de Pineta en Bielsa (Huesca)
- Monasterio del Olivar en Estercuel (Teruel)
- Afueras de Farlete (Zaragoza)
- Villar del Salz (Teruel)
- Frías de Albarracín (Teruel)
