Belloch presenta sus memorias: "Lo más difícil es hallar el alma de una ciudad y la encontré aquí en Zaragoza"
La presentación del libro reúne a decenas de representantes de la política, la cultura, la empresa y el derecho en el palacio de Sástago de la capital.
Ha sido un encuentro de amigos, de viejos y nuevos, y sobre todo un homenaje: al hombre, al político y a la ciudad que rigió durante 12 años y que transformó con la Expo 2008. Ante un salón del trono del palacio de Sástago hasta la bandera, el magistrado, exalcalde y exministro Juan Alberto Belloch ha presentado este martes su libro de memorias ‘Una vida a larga distancia’, en el que repasa su trayectoria personal y política y describe parte de la historia de España y de Aragón.
“Lo más difícil es hallar el alma de una ciudad y la encontré aquí en Zaragoza”, ha dicho Belloch en el acto de presentación, en el que ha estado acompañado por el expresidente de Aragón, Marcelino Iglesias, su esposa, Cruz Soriano y el escritor Juan Bolea. De las labores de presentación se ha encargado la diputada provincial y concejal Ros Cihuelo.
En la sala han estado cargos de partido, antiguos colaboradores, funcionarios municipales, rivales políticos y representantes del tejido social, económico, cultural y jurídico. Durante la presentación ha intervenido quien fuera su mano derecha en el Ayuntamiento, Fernando Gimeno, que ha dicho que con Belloch “llegó el glamur a la ciudad de Zaragoza”. “Juan Alberto siempre lo ha pensado todo a lo grande”, ha opinado.
También ha hablado Fernando Escribano, director general en el Ministerio de Justicia cuando estaba al frente Belloch. Escribano jugó un papel determinante en el proyecto de la Expo 2008, al ser en esa época director de gabinete de la exvicepresidenta Teresa Fernández de la Vega. Ha destacado el legado de Belloch en el Ministerio de Justicia, con el Código Penal y la Ley del Jurado como grandes obras, así como su etapa en la muestra internacional de 2008. “La Expo fue la gran ilusión de nuestras vidas”, ha afirmado
Marcelino Iglesias ha relatado cómo construyó una relación de gran amistad tras unos inicios marcados por la desconfianza. "Aprovechamos para hacer una gran transformación de la ciudad", ha recordado. Cruz Soriano ha rememorado su llegada a Zaragoza y cómo Belloch se mostró decidido "a conquistar la ciudad uno a uno". Bolea ha subrayado "la voz propia" del libro, así como su "elegancia" y "toque irónico".
En las distintas intervenciones se ha destacado la gran influencia que Belloch ha recibido de su madre. "Tiene razón Marcelino cuando dice que dos mujeres ocupan un papel decisivo en mi vida. Una mi madre y otra la que tenéis aquí, que me empujó a hacer el libro", ha dicho Belloch en referencia a su esposa
El exacalde ha citado casi uno por uno a los que colaboraron con él. "De la única virtud que siempre presumo es que sé formar a los mejores equipos de personas", ha dicho Belloch. "Aquí estáis mi equipo que comulgamos con una idea de Zaragoza, de Aragón. Hay que tener actitud de consenso, pero sin los cómplices del proyecto no habría resultado", ha expresado.
Ha habido una notable representación de exconcejales socialistas, como Jerónimo Blasco, Rosa Borraz, Yolanda Bueno, Inés Polo o Carmen Dueso. Han acudido además antiguos colaboradores, como su directora de comunicación, Mercedes Gracia, su jefe de gabinete, Carlos García Palacián, o el periodista José Carlos Arnal. También gran parte de los concejales socialistas de la actual corporación, encabezados por su portavoz, Lola Ranera, Alfonso Gómez, Guillermo Ortiz y Francisco Galán.
Pero también han asistido dirigentes del PP, empezando por su líder en Aragón y exalcalde, Jorge Azcón, que negocia estos días su investidura como presidente de la Comunidad. Belloch lo ha calificado de amigo y ha sido objeto de bromas por parte de algunos de los presentes. Los ediles Ángel Lorén y Marián Oros o exconcejales como Octavio López, Domingo Buesa, Rafael de Miguel y Elena Allué no se han perdido la presentación de Belloch.
Allí estaban también representantes del sector económico, como presidente de honor de la Cámara de Zaragoza, Manuel Teruel, el expresidente de Cepyme Aurelio López y los empresarios Felipe Sanz y María López. También estaba el abogado Enrique Trebolle, el médico Carlos Valcarreres, el pintor Pepe Cerdá o el arquitecto Joaquín Sicilia.
