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Confiesa que inmovilizó e intentó degollar con un cúter a un vecino de Tauste
El agresor ha aceptado este jueves una condena de cuatro años de prisión por los hechos ocurridos el 6 de febrero de 2020 en una pequeña caseta del municipio. Los forenses creen que la víctima, de 47 años, hubiera perdido la vida de no ser intervenida de urgencia en el hospital Clínico de Zaragoza.
Cuatro años de prisión y el pago de una indemnización de 17.000 euros. Esa es la condena que la Audiencia de Zaragoza impondrá a José Luis Rodríguez Martín tras confesar que el 6 de febrero de 2010 intentó degollar a un conocido pasándole la cuchilla de un cúter por el cuello. Los hechos se produjeron de madrugada en una pequeña caseta ubicada a las afueras de Tauste, parece ser que por una deuda de drogas. Lo que sí tienen claro los forenses es que, de no haber pasado por el quirófano, la víctima, de 47 años, estaría hoy muerta. Porque sufrió un corte de 10 centímetros en forma de “Y” que le alcanzó la vena yugular externa.
El agredido, J. M. M. L., fue traslado de urgencia al hospital Clínico de Zaragoza, donde nada más llegar tuvieron que hacerle una transfusión de sangre. Además de la grave herida del cuello, presentaba otros dos cortes en la oreja derecha que también precisaron de tratamiento quirúrgico. Según el informe médico, existió riesgo vital, de ahí que el juez instructor acabara procesando al agresor como presunto autor de un homicidio frustrado. Por fortuna, el paciente evolucionó de forma favorable. Y aunque pasó por la uci y tardó más de tres meses en recuperarse, sus únicas secuelas son estéticas.
La Fiscalía y la acusación particular, a cargo del letrado Pedro Luis Martínez, acusaban al procesado de un delito de tentativa de homicidio en concurso con otro de lesiones graves con instrumento peligroso, por los que ambos pedían una pena de 8 años. Sin embargo, al reconocer los hechos en su integridad, las partes han llegado a un acuerdo que permitirá rebajar el castigo a la mitad. Para ello, la defensa, de la que se encarga la abogada María Vanesa Benito, ha negociado la aplicación de dos atenuantes: la de reparación del daño y la drogadicción. El acusado ha tenido que desembolsar 3.000 euros por adelantado y comprometerse a pagar el resto de la indemnización antes de que acabe marzo.
La Guardia Civil identificó y detuvo enseguida a José Luis Rodríguez Martín, que se encuentra en prisión provisional por estos hechos desde entonces. Y al no arrastrar antecedentes penales, con la condena que ahora le será impuesta podrá empezar a pedir permisos en breve.
Una posible venta de droga
Según el auto de procesamiento, el acusado acudió al lugar de los hechos acompañado de otras dos personas: un hombre identificado como José Luis C. G. y una mujer llamada Teresa H. J. Al llegar a la caseta, ubicada en el camino de Las Viñas, los tres accedieron al interior, donde se encontraba la víctima y otro hombre, de nombre Esteban A. G. La Guardia Civil cree que los primeros acudieron allí con intención de comprar droga, pero el juez instructor no llegó a hacer mención alguna a los motivos en el auto de procesamiento. Lo que sí se consideró indiciariamente probado fue que el único agresor fue José Luis Rodríguez Martín, puesto que así lo habrían puesto de manifiesto tanto el herido como su acompañante. Y lo cierto es que ningún delito se atribuyó a la pareja que se desplazó con el encausado hasta el cobertizo, de apenas 18 metros cuadrados.
Durante la inspección ocular de la caseta, el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Zaragoza se encontró con un enorme rastro de sangre, pero logró recuperar el cúter con el que atacaron a la víctima: de 20,5 centímetros, con una hoja afilada a la vista de 6 centímetros. También se localizó en el suelo un hacha de mano de 37 centímetros y una cizalla.
