Collares, ropa, libros, vinilos, portabebés o complementos 'vintage'... Quien diga que es difícil 'picar' un domingo se equivoca, pues el mercadillo de Las Armas no pone nada fácil el resistirse a comprar.

Como cada segundo domingo del mes, los puestos han vuelto a retomar su actividad tras el parón vacacional para atraer en la mañana de hoy a una gran cantidad de familias, parejas y amigos que se han dejado llevar por el ambiente de la zona. "El buen tiempo siempre invita a pasear y pasar un buen rato y el sitio está bien para dar una vuelta", cuenta María mientras va parando en cada uno de los puestos que pilla.

Este domingo, han sido 33 tiendas locales y 'online' las invitadas a mostrar sus productos en la plaza, junto al Centro Musical Artístico Las Armas. "Para nosotros es una ayuda el estar cerca del centro y creo que para el que viene tampoco cansa porque no está todos los fines de semana", valora Patricia, propietaria de la tienda zaragozana Menuda Tribu.

La Asociación de Espacios Creativos Las Armas se encarga de organizar esta actividad que cumple un año en el barrio del Gancho. "Desde que empezamos, solo hemos parado en enero y en agosto y la verdad es que ha ido creciendo mucho desde las primeras ediciones", destaca Estefanía Abad. Ella fue una de las primeras en montar su puesto de fotografía en esta plaza, que hoy reúne a un 99% de empresas "invitadas". La mayoría son locales, pero también las hay de otras ciudades de España, como Madrid, Barcelona o Bilbao.

"Se intenta que haya variedad y, de hecho, la mayoría de los productos son artesanos", subraya Estefanía.

La ambientación musical, que suele correr a cargo de grupos de jazz locales, y una pequeña barra de Villafeliche para tomar el 'vermú' a media mañana ponen una nota característica a este mercadillo del Gancho que se asienta ya en la capital aragonesa como una alternativa más para pasar un buen rato.

Dar a conocer y revitalizar el Gancho

La iniciativa surgió hace apenas un año, cuando ocho locales de emprendedores zaragozanos, que habían participado en el Urban Picnic y el Chiquitown, decidieron sacar sus puestos a la calle para que la gente viniera, conociera esta zona y mostrara su trabajo. "Como tuvo tan buena aceptación, pensamos en darle una cadencia más fija y que otras empresas se animaran a venir porque aunque muchas sean tiendas 'online', la gente al final siempre se anima más a comprar si lo puede ver o tocar", explica Estefanía. 

Es el caso de la tienda de modas y complementos Aloha juice, donde una joven Patricia Parra muestra y vende algunas de las prendas, diademas y pasadores que ella misma diseña. Otras -matiza- las trae de fuera. "Al no tener tienda física, la gente enseguida se acerca. Además, al ser de aquí, la gente te apoya mucho", dice animada. Vende desde complementos para el pelo por 2 y 4 euros a sudaderas de edición limitada que van desde los 18 a los 65 euros. 

Unos puestos más allá, Verónica Castillo atrae con su mercancía a un montón de familias. Ella confecciona patucos y chancletas de punto para bebés que expone en su puesto junto a unos orginales 'packs' de pijama-disfraz más cuento. "Los vendemos así como una forma de fomentar la lectura. Queremos que el niño a la hora de irse a dormir se sienta como el protagonista de estas historias", relata esta joven mientras enseña el vestido de 'La niña equilibrista' y el disfraz de 'El hombre bala'.

Otro imán para las familias es el puesto de la oscense Laura Gracia, que vende portabebés de tela y mochilas ergonómicas capaces de soportar hasta 20 kilos. "Empecé a venir aquí como visitante y me gustó tanto que al poco tiempo me planteé el venir como tienda", confiesa. Los más clásicos los vende por 45 euros, mientras que las morchilas más caras rondan los cien euros.

Para despedir la entrada al mercadillo, no sin antes tomarse un vermú, atiende otro puesto de 'joyas' musicales Manuel Lorenzo, uno de los pioneros. Entre todos los discos y vinilos que oferta destaca la buena venta del rock y los grandes éxitos de Queen o The Beatles. "La música siempre anima a la gente a venir y la verdad es que encuentras un ambiente muy majo y muy jovial en la zona", cuenta, sonriente, Manuel.

- Ver otras noticias de Zaragoza.