INTERIOR

Vigilancia en las mezquitas

Aragón fue un lugar de paso de varios implicados en los atentados del 11-M. Las Fuerzas de Seguridad del Estado tienen indicios de que el islamismo radical se practica en alguna mezquita de Zaragoza y la controlan. Es el caso de la de Las Armas, cuyo imán aparece en una lista policial

El final del Ramadán se celebró en dos escenarios distintos en la capital aragonesa. La Comunidad Islámica se fue a la Expo con casi tres mil fieles procedentes de nueve de las diez mezquitas de toda la ciudad (Almozara, Delicias, Torrero, Oliver...) y el Centro Cultural Islámico del Casco Viejo optó por convocar a sus fieles en La Granja, que reunió a un millar. Mientras unos musulmanes interpretan que la división solo tiene que ver con la comodidad de la cercanía en autobús, otros consideran que las celebraciones separadas obedecen a las dos líneas muy distintas en el Islam practicante. Una ortodoxa y otra radical.


Las Fuerzas de Seguridad del Estado sospechan que el islamismo “radical” se practica presuntamente en la mezquita de Las Armas. Según publicó ‘El Mundo’, el imán Lahousine Aouane está en la lista de los clérigos salafistas controlados. “Los agentes aseguran que es un exponente esencial del islamismo radical -afirmó este diario nacional-. En sus exposiciones suele aludir a los principales conflictos en los que está involucrado el mundo musulmán y pide por los muyahidines”.


Sin embargo, el sospechoso negó esta acusación en una entrevista con HERALDO porque defiende que “el Islam es un defensor de la paz” y sostiene que en las charlas de los viernes no se dedica a rezar por los muyahidines de Afganistán, Gaza o Iraq.Defensor del imán de Lérida

Aun así, el clérigo de la mezquita de Las Armas, que lleva trece años en la capital aragonesa, defiende a su homólogo de Lérida, el polémico Abdelwahab Houzi, imán al que la Policía sitúa en cabeza de la _lista de los más radicales. “La Policía debería hablar más _con Abdelwahad porque es contrario al terrorismo”, recomienda.

“Los marroquíes venimos a España a trabajar para hacer _dinero y enviarlo a Marruecos hasta que volvemos. A la mezquita vamos a rezar cinco veces al día. Somos los primeros en estar contra los atentados de Madrid y de América”, reitera el imán Lahousine junto a Ahmed, otro “hermano” marroquí de Las Armas.

La paradoja es que el imán marroquí Lahousine Aouane, un antiguo deportista de 39 años, casado y con cuatro hijos, dice colaborar con las investigaciones de la Policía contra el terrorismo islámico. “Hace dos días estuvo un policía aquí y soy el primero en avisarles si veo a alguno porque también me conviene”, señaló. De hecho, reconoce a uno de los terroristas que le muestro, Abdelkrim Hammad, un argelino del GIA que proclamó la guerra santa en 2001 en Zaragoza, pero al final fue detenido en Navarra.Ni descuidarse ni generalizar

Los atentados del 11-M en Madrid en 2004 sacaron a la luz los escasos efectivos policiales para combatir y prevenir este peligro del terrorismo islámico. La agonía de ETA y la preocupación del Gobierno han _llevado a multiplicar el número de agentes dedicados a investigar este fenómeno. Si _antes la unidad se centralizaba en Madrid, en la Policía y la Guardia Civil, ahora los agentes de Información de las jefaturas provinciales cubren parte de esa tarea. “Hay más radicales en Navarra y Cataluña, pero aquí ni se puede bajar _la guardia ni generalizar”, apuntan.


España sigue en las webs radicales. La liberación de los cooperadores al pagar el rescate a Al Qaeda, la muerte dos guardias civiles y un traductor y la manifestación contra la base española en Afganistán. Es un peligro latente.