Las reservas de nieve en el Pirineo se multiplican hasta por diez en dos semanas
Las estaciones de esquí de Astún-Candanchú, Formigal-Panticosa y Cerler ofrecerán más de 270 km el próximo fin de semana. Mientras, los espacios nórdicos sumarán cerca de 40 km.
La imagen del Pirineo aragonés ha cambiado radicalmente en apenas dos semanas. Y la prueba es que hay algunas zonas donde las reservas de nieve se han multiplicado hasta por diez, según las últimas estimaciones de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
El paso de las últimas borrascas ha beneficiado especialmente a la parte más occidental. Así, las reservas de nieve de la cuenca del río Aragón han pasado de 28 a 226 hectómetros cúbicos equivalentes de agua, entre las mediciones realizadas el 19 de febrero y el 4 de febrero. Hace solo dos semanas estaba en el nivel mínimo de los últimos cinco años mientras que ahora registra los máximos de ese mismo período de tiempo de promedio.
En el resto de cuencas del Pirineo también se han registrado notables aumentos, aunque muy inferiores. En el río Gállego, por ejemplo, ha pasado de 60 a 115 hm3 equivalentes, casi el doble, y de su nivel mínimo de los últimos cinco años a otro normal; en el Ara, de 46 a 97, más del doble, y de nivel bajo a muy alto; en el Cinca, de 98 a 163 hm3, y de nivel muy bajo a alto; y en el Ésera, de 65 a 130 hm3, y del nivel mínimo de los últimos cinco años a alto.
Además, las previsiones para la próxima semana son favorables en general ya que, según la CHE, se esperan incrementos en las cuencas del Cinca (26 hm3), Ésera (19), Gállego (17) y Ara (8), mientras que en el Aragón sí que podrían bajar 17 hm3.
Como consecuencia de ello, las estaciones del Pirineo también han mejorado espectacularmente sus condiciones duplicando prácticamente el dominio esquiable. Y es que si el 18 de febrero abrieron 140 km con espesores de entre 15 y 90 cm, este próximo fin de semana confían en superar los 270 km entre Astún-Candanchú (86), Formigal-Panticosa (143) y Cerler (47) con espesores de 40 a 300 cm.
Hace dos semanas solo había un espacio nórdico abierto y ahora ya son cinco (Llanos del Hospital, Balneario de Panticosa, Pineta, Gabardito y Linza) que suman cerca de 40 km.
