La Audiencia Provincial de Huesca ha celebrado este martes la primera sesión del juicio por el atraco en la estación de esquí de Formigal ocurrido el 24 de febrero de 2013 y en el que los cuatro acusados, todos ellos trabajadores o extrabajadores de seguridad del centro invernal, se llevaron presuntamente un botín de 31.693 euros. Antes del inicio de la vista, el abogado de Aramón retiró la acción penal después de que los procesados ingresaran el importe de la recaudación robada, aunque la Fiscalía sí mantuvo su petición de 56 años de prisión (14 para cada uno de ellos).

En sus declaraciones, solo uno de los procesados confesó su participación en los hechos con el fin de poder pagar una deuda de 5.000 euros que había contraído jugando al póker, mientras que los otros tres negaron cualquier implicación y se limitaron a acusarse mutuamente de haber ideado el plan para atracar el vehículo de Formigal que llevaba la recaudación de la estación.

Entre los testigos citados estaba el contable que fue secuestrado en el atraco, que ha tenido que recibir tratamiento psiquiátrico debido a las secuelas provocadas por la detención ilegal y la violencia que emplearon los atracadores, a los que no pudo reconocer porque iban tapados con gorros y gafas de ventisca.