política
Bronca en las Cortes de Aragón entre la izquierda a cuenta del chef José Andrés y Gaza
Al final del Pleno de este miércoles se enfrentaron PSOE, IU y Podemos por una proposición no de ley para condenar el asesinato de los cooperantes del chef José Andrés en Gaza.
El último punto del orden del día del Pleno de la Cortes de Aragón celebrado este miércoles encendió los ánimos de los grupos parlamentarios de izquierda a cuenta de la proposición no de ley (PNL) que presentó a debate y votación el PSOE para condenar el asesinato en Gaza de un grupo de cooperantes internacionales de la ONG del chef Andrés World Central Kitchen. Los reproches también llegaron desde las bancadas de las formaciones de derecha, pero por motivos distintos.
Los socialistas buscaban con la PNL 201/24 sobre la muerte de cooperantes en la frontera de Gaza "el máximo consenso, la unidad de esta Cámara en torno a una catástrofe humanitaria", como comenzaba su intervención Daniel Alastuey, el diputado encargado de su defenderla antes de la votación. Esta salió adelante, no sin provocar un agrio debate en el que para partidos como IU y Podemos se quedaba corta y donde PP y Vox aprovechaban para sacar a colación a Bildu, ETA y las elecciones vascas.
Alastuey reconocía en su introducción que todo va "muy deprisa" y que a alguien le podía parecer "anacrónica" la presentación de esta PNL (el ataque se produjo el pasado 2 de abril), como algún partido diría después, pero querían condenar esos hechos, solidarizarse con las víctimas y sus familias, apoyar el trabajo de las ONG y rechazar los discursos de odio "que tantos conflictos generan".
"Al borde de la hambruna"
El socialista comenzó recordando el origen histórico del conflicto que enfrenta a israelíes y palestinos "hace más de un siglo" y los principales hitos hasta que el 7 de octubre ocurrió el "ataque terrorista" de Hamás que dejó más de 1.000 muertos, 3.000 heridos y 100 rehenes. El socialista apuntó que "Israel tenía derecho a defenderse, en un sentido muy claro, hacer pagar a los culpables y recuperar a los rehenes", pero que "en seis meses no ha habido proporcionalidad". Alastuey recordó los 34.000 muertos en Gaza y que Israel "ha puesto al borde de la hambruna a más de un millón de personas". Además se han "arrasado las infraestructuras" y faltan suministros, de ahí la necesidad de las ONG y lo "simbólico" del ataque "a lo más necesario, la ayuda humanitaria".
Críticas desde la izquierda
Sin embargo, el texto lejos de recuperar el "espíritu" de unidad que se vivió en la comunidad internacional tras la muerte de los cooperantes, solo consiguió dividir a los partidos de izquierda, que respondieron duramente al portavoz socialista y de introducir en el parlamento autonómico la campaña electoral vasca. Álvaro Sanz (IU) se dirigió al socialista Alastuey para decirle que "el lenguaje no es inocente, como no lo es poner el foco solo en una esquinita del problema".
"Del inmenso infierno, al que el estado sionista de Israel está sometiendo y convirtiendo Gaza, no, señor Alastuey, no nos pueden servir solo las víctimas blancas y occidentales. Por supuesto que es terrible el asesinato de estos siete cooperantes, pero lo es igual el asesinato de los 191 cooperantes que asesinaron antes o lo es igual el asesinato de los más de 100 periodistas y el ataque contra el 6% de la población gazatí, entre asesinados, más de 34.000 desaparecidos y heridos".
"Y todo ello son cuestiones que no dice Izquierda Unida, sino la ONU y las resoluciones inclumplidas", añadió el portavoz. En ellas recalcó que se señala a Israel como "fuerza ocupante" y "genocida".
"Por eso, hay que poner las cosas en su sitio, para este menester teníamos que haber sido más valientes en defensa de la paz, como único camino, la paz". El diputado terminó con un "No a la guerra".
Desde Podemos se subió aún más el tono para calificar la proposición presentada por el PSOE como "la PNL de la vergüenza". El portavoz Andoni Corrales reprochó al socialista que "no ha dicho nada de los 14.000 niños muertos, más de 30.000 personas asesinadas". "Usted habla de ataque; puede hablar ya de genocidio, señor Alastuey", le espetó.
El diputado de la formación morada lamentó "que tengan que morir occidentales para acordarse el Partido Socialista de Palestina, me parece vergonzoso, pero vergonzoso a niveles muy altos". Revisando la PNL se preguntaba si cuando da el pésame a las familias de los cooperantes de la citada ONG, "¿los demás no existen?".
"Con la hambruna que está generando el estado genocida de Israel, con mayúsculas, me dan ganas de votarle que 'no' a todo", concluyó.
Alastuey se dirigió a Sanz para explicar que "queríamos focalizar el hecho de siete miembros de una ONG" y mostró su apoyo si la formación también presenta alguna otra PNL sobre el conflicto.
Desde CHA, José Luis Soro, mostró su apoyo, pero se planteó tras el debate: "¿Qué pensaría un joven gazatí?" o un familiar de un israelí secuestrado al escuchar los discursos. Soro criticó que "se utilice su drama políticamente". Se mostró a favor "de cualquier iniciativa de paz, por mucho que nos parezca anacrónica e insuficiente".
"La violencia de uno no justifica la del otro", continuó Soro para reiterar que "aquí hay violación de los derechos humanos". "Solución, la paz. Solo hay una solución, hacer caso a lo que dice la ONU, crear un estado palestino", defendió.
Aragón Existe también respaldó la iniciativa. María Pilar Buj denunció que "no se están respetando a las poblaciones civiles" como era el caso de estos cooperantes. "Por desgracia nos tememos que con la escalada vivida en los ultimos días no será la última vez que tengamos que hablar de desgracias en Oriente Medio", auguró.
La derecha ataca con Sánchez y Bildu
Los grupos de la derecha dieron su apoyo, con reproches para la PNL de los socialistas, pero por otros motivos y aprovecharon para enlazar con la campaña electoral vasca. La portavoz del PP, Carmen Herrarte, criticó la "rapidez y eficacia" para condenar muertos en Oriente Próximo y no en pedir a Bildu, sus "socios de investidura", que condenen 800 muertos de ETA. "Mucha sensibilidad con unos muertos y muy poca con otros", reprochó Herrarte, que no escatimó en críticas al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Ustedes han blanqueado a Bildu, los herederos de ETA pueden gobernar en el País Vasco", le dijo al socialista. "Por siete votos tienen el orgullo roto", terminó, parafraseando una expresión repetida en las protestas contra el presidente español.
Por su parte, Carmen Rouco (VOX) comenzó diciendo que "claro que se condenan los ataques a siete cooperantes si hasta el estado de Israel lo condenó" y mostró solidaridad con familias víctimas del ataque de Hamás del 7 de octubre y con los secuestrados que siguen en manos de los terroristas siete meses más tarde. Hizo especial hincapié a las mujeres "violadas tantas veces que se han recuperado cadáveres con las pelvis rotas". De ahí pasó a criticar que los compañeros de viaje del señor Sánchez, en referencia al presidente del Gobierno, sea Bildu. Del presidente socialista dijo que "rompe y destruye la convivencia" dentro de España.
Alastuey respondió a la izquierda que "ya sabemos que es injusto, que han muerto 34.000 personas, pero la opinión mundial empezó a cambiar con la muerte de estos cooperantes". A las protestas de la derecha y la ultraderecha el socialista se dirigió a Herrarte para reprocharle que "solo le interesaba hablar de Bildu". Señaló que pretendían hacer "una proposición de ley equilibrada, que pudiera votar la mayor cantidad de diputados posible" y se ha centrado en un hecho puntual que ha "galvanizado la conciencia mundial".
Finalmente, tras unos problemas técnicos con la votación, que obligaron a repetirla, la proposición salió adelante con 56 votos a favor y 7 abstenciones.
