El Rey disfruta de las pistas de Formigal en un sábado de gran afluencia de esquiadores en el Pirineo aragonés

El rey Felipe VI ha disfrutado este sábado de una gran jornada de esquí en la estación de Formigal-Panticosa, que le ha recibido con una imagen de postal ya que se encuentra en el mejor momento de la temporada con 168 km y espesores que llegan hasta los 270 cm en las cotas más altas.

Es su primera visita a los centros invernales del Pirineo aragonés desde antes de la pandemia -la última también fue a Formigal en 2018-, Felipe de Borbón llegó a las pistas a las 10.00 acompañado por el presidente ejecutivo del grupo Aramón, Antonio Gericó.

Accedieron por las zona de Sextas, guardando fila como el resto de esquiadores para subirse al telesilla de Sallent. Durante ese corto trayecto fueron muchos los que se percataron de la presencia del monarca pese al casco y el atuendo de esquí y pudieron cruzar con él unas palabras agradeciéndole su visita y deseándole un buen día de esquí. Otros aprovecharon para retratar el momento con sus móviles. "Mira, ahí está el Rey", le dijo una madre a sus hijas pequeñas.

Comida en La Glera, a 2.00 

Junto a Gericó pudo recorrer durante la soleada y calurosa mañana gran parte del dominio de la estación. Y para reponer fuerzas, Don Felipe tuvo la oportunidad de comer en La Glera, un restaurante único a más de 2.000 metros de altitud ubicado en una pequeña y exclusiva cabaña con capacidad para 18 personas, al que solo se puede acceder a través de una ‘ski ratrack’ (máquina pisapistas), con carnes a la brasa y rodeados de un entorno único.

Por la mañana coincidió con el presidente de Aragón, Jorge Azcón, que le saludó y le deseó una buena estancia en el valle de Tena. Además, aprovechó para invitarle a volver a los centros invernales de la Comunidad.

El Rey prolongará su viaje privado hasta este domingo, cuando también tienen pensado disfrutar del deporte blanco en la estación de Formigal-Panticosa.

Fotos | Así ha sido la vuelta del rey Felipe VI a la estación de esquí de Formigal

Para el presidente de la Asociación Turística del Valle de Tena, Jesús Pellejero, la estancia del rey Felipe VI es una "promoción excelente" para esta zona en particular y para todo el Pirineo aragonés en general porque, además, se ha podido llevar una carta de presentación "inmejorable". "Le gusta mucho esquiar y disfruta de Formigal-Panticosa, y ha elegido el mejor momento para venir con casi todos los kilómetros abiertos, hasta arriba de nieve y buen tiempo. Esta visita nos pone en el ‘top’ de las estaciones de esquí de todo el país", valoró.

Aunque sea un pequeño gesto, Pellejero considera que "todo suma y puede ser un empujón para que Aragón se crea de verdad que debe ser el líder en el sector de la nieve y que tenemos que ir a por ello, porque a veces parece que nosotros mismos nos ponemos palos en las ruedas cuando lo tenemos todo, un entorno inmejorable, las montañas, la gente, los empresarios, los servicios...".

Sorpresa entre los esquiadores

Esther Lacruz, de Huesca, se ha llevado una buena colección de fotos de Felipe de Borbón con su móvil. "Sabía que venía, pero no estamos aquí por eso (entre risas). Hemos traído a una hija a esquiar", ha explicado. Ya había visto a Felipe VI en persona en alguna ocasión "pero nunca tan cerca". Y se ha llevado una grata impresión: "Me ha parecido muy cercano y me ha encantado que hiciera cola como todos en el remonte". Además, espera que su presencia sirva de promoción para el sector del esquí del Pirineo aragonés "porque como esto no hay nada en España".

Fotos | Miles de personas esquían en Formigal este sábado

Felipe VI ya estuvo en Formigal con solo seis años y la última vez que visitó la estación en 2018 también le acompañó Jesús Gericó y el desaparecido Eduardo Roldán, exdirector de Candanchú, a cuyo funeral en Jaca acudió el monarca. En 2017, en su primera visita al Pirineo aragonés como rey, esquió en Astún acompañado por la reina Letizia y por sus hijas. La familia real también ha sido asidua a Candanchú.