Este es el pueblo de Aragón con más fósiles de dinosaurio de Europa
El territorio aragonés alberga un rico patrimonio paleontológico. Pero un municipio destaca entre los demás por ser en el que mayor número de vestigios de dinosaurio se han descubierto.
Los dinosaurios vivieron en lo que hoy conforma el territorio de Aragón hace millones de años. Prueba de ellos son los numerosos yacimientos paleontológicos que se han encontrado en nuestra comunidad, sobre todo en la provincia de Teruel. Y es precisamente un municipio de esta provincia el que bate todos los récord de Europa en lo que a hallazgos de dinosaurios se refiere.
En este lugar, además de los vestigios encontrados por los paleontólogos, se han descubierto algunos de los restos más llamativos y sorprendentes de estos gigantescos reptiles como son las icnitas, es decir, la huella fosilizada de un animal, tal y como define la Real Academia de la Lengua Española, que, con el paso del tiempo, han acabado fosilizándose y convirtiéndose en piedra, perdurando hasta la actualidad.
El yacimientos de icnitas y de restos fósiles de dinosaurio más importantes de Aragón es el de El Castellar, que lleva el nombre del pueblo en el que se encuentra y que ha sido nombrado como el municipio más paleontológico de Europa. En este municipio de la comarca de Gúdar-Javalambre se pueden ver más de 330 huellas en el tramo principal y unas 800 a lo largo de todo el yacimiento.
En el mismo término de El Castellar se encuentra el yacimiento Camino el Berzal que reúne una treintena de icnitas pertenecientes a saurópodos, aunque podrían incluir algún otro tipo de dinosaurio cuadrúpedo.
Recientemente, paleontólogos de la Fundación Dinópolis han descubierto en El Castellar huellas de dinosaurios que aportan una información excepcional acerca de cómo caminaban los grandes ornitópodos, como el Iguanodón, cuyo cuerpo medía 10 metros de longitud. Se trata de icnitas de pie y mano asociadas con un grado de detalle anatómico singular que permiten afirmar, entre otras cuestiones, que los grandes dinosaurios del Cretácico tenían más agilidad en los dedos de lo que se pensaba hasta ahora.
