Tercer Milenio

En colaboración con ITA

ECONOMÍA

Vanguardia biotecnológica desde Calatayud

Levprot desarrolla proteínas para farmacia, diagnóstico 'in vitro' y alimentación, un área que le ha granjeado un premio a la innovación.

Levprot
Personal de Levprot trabajando en uno de los laboratorios de la compañía.
MACIPE

La firma aragonesa Levprot Bioscience arrancó en agosto de 2022 su actividad en Calatayud. Después de una inversión que supera los 3,5 millones de euros, 800.000 euros de financiación púbica y con 17 trabajadores en plantilla, su labor va tomando velocidad de crucero en la producción de proteínas recombinantes a partir de la fermentación de alta precisión en células de levadura. Con este proceso obtienen componentes fundamentales para, entre otros, fabricar test de diagnóstico, desarrollo de vacunas, laboratorios de investigación, biocombustible o en el campo de la alimentación o 'foodtech'.

"Engañamos a las células de levadura para que trabajen para nosotros. Se convierten en pequeñas fábricas y nosotros después separamos el resultado de ese trabajo. Es un sistema muy escalable, las células se duplican por billones, y rentable, y es mejor que otros materiales biológicos, que son más caros y sufren contaminación cruzada", explica Matilde de las Rivas, directora técnica - Chief Technology Officer (CTO)- de la compañía. En estos momentos, sus esfuerzos se centran en mejorar la producción y en buscar alianzas con otras empresas, entre ellas algunas referentes del mercado alimentario.

Ese material que extraen es, por ejemplo, el que se impregna en la pequeña membrana de un test de antígenos sobre la que luego se vierte la solución para saber si se padece una enfermedad contagiosa. En este año, han ido incorporando tanto personal como el equipamiento necesario para alcanzar un volumen óptimo de producción. Así, en sus más de 5.000 metros cuadrados de instalaciones, en los que se incluyen seis laboratorios, cámaras de frío y para liofilización, ya tienen una capacidad de fermentación de más de 70 litros, a la que se sumará un biorreactor de 50 en 2024.

"Hacemos lo mismo que grandes casas internacionales, por ejemplo, en Alemania. Sin nada que envidiar, porque contamos con un equipo que hace ciencia del más alto nivel", defiende de las Rivas. Asimismo, la responsable de la planta también subraya que el uso de levaduras en alimentación se trata de un proceso que se ha utilizado "toda la vida" para hacer alimentos tan generalizados y del día a día como el pan y el vino.

Brazeína, mismo dulzor y más saludable

En la actualidad, una de sus principales líneas de trabajo es producir brazeína, una proteína 2.000 veces más dulce que el azúcar. "En colaboración con el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria y su programa Food(Tech)2Challengers, hemos comprobado que introduciendo la brazeína en un yogur, se puede reducir el 30% de azúcar y no percibes diferencia", ilustra. Esto les abre un campo de posibilidades en infinidad de productos, lácteos, bebidas carbonatadas o alcohólicas con bajo contenido en azúcar.

"El consumidor percibe el dulzor, pero no sufre los efectos secundarios, ni del azúcar ni de edulcorantes artificiales. Uno de los mayores problemas de salud es el exceso de azúcar, que es uno de los principales responsables de la obesidad, la diabetes tipo 2 o enfermedades neurodegenerativas. Actualmente ni es sostenible ni saludable", argumenta. Además de ofrecer el producto terminado, de las Rivas explica que otro de los objetivos es ofrecer servicios de investigación y desarrollo a otras empresas alimentarias, que puedan optimizar e incorporar estos avances en sus propios procesos productivos.

Esta línea de trabajo le ha servido a Levprot para ganar el premio a la 'startup' más innovadora en 'ftalks Food Summit'. Organizado por KM Zero, es una cita a la que acudieron gracias a participar en el programa 'Desafía', que coordina el Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).

ALGUNOS DETALLES

Actividad. Levprot utiliza células de levadura para fabricar enzimas y otras proteínas que se usan como biomaterial en test de diagnóstico y otras áreas biosanitarias, así como para desarrollar proteínas sostenibles con fin alimentario, como su proteína dulce.

Inversión. La firma aragonesa ha invertido para la puesta en marcha de su planta bilbilitana en 2022, en adecuación y equipamiento, más de 3,5 millones de euros.

Personal. En las instalaciones bilbilitanas trabajan 17 personas, con alta cualificación y especialización. Seis de ellos son doctores.

Premio. A la 'startup' más innovadora en el foro 'ftalks Food Summit', organizado por KM Zero, por su proyecto de desarrollar brazeína, una proteína 2.000 veces más dulce que el azúcar y más saludable. Dotado con 5.000 euros, fue otorgado en colaboración con la empresa Vicky Foods, líder en el sector alimentario nacional.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión