El plan de evacuación del Zambrano incluye trasladar a los alumnos de infantil a otro edificio a partir de una alerta amarilla
La DGA ha trasladado al equipo directivo el documento de autoprotección tras las inundaciones del pasado 6 de julio y se hará un simulacro lo antes posible.
El plan de evacuación del colegio María Zambrano de Parque Venecia de Zaragoza contempla, tras las importantes inundaciones y desperfectos que sufrió el centro el pasado 6 de julio, que los alumnos de las 12 aulas de Infantil se trasladen al cercano edificio de Primaria que se ha estrenado este jueves. Se activará desde el momento en que llueva y haya una alerta amarilla por tormentas, el nivel más bajo de riesgo. Será el 112 de la Comunidad, y en base a las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el que comunicará si es necesario o no trasladar a los escolares.
El Gobierno aragonés ha presentado al equipo directivo este plan de autoprotección que van a evaluar con la idea de que responsables del Ejecutivo autonómico y algún experto lo expliquen con detalle en el centro la semana que viene. El director del María Zambrano, Ernesto Ferrera, ha apuntado que tienen la intención de llevar a cabo "un simulacro lo antes posible" y determinar así cuánto tiempo se puede llegar a invertir en este traslado.
El equipo directivo, ha explicado Ferrera, deberá ponerse en contacto con el 112 en cuanto llueva y haya una alerta amarilla. Aunque en un principio se valoró activarlo en caso de aviso naranja, finalmente se ha decidido que se ponga en marcha desde el momento en que haya una alerta mínima.
Los alrededor de 250 niños que acogen la docena de aulas de Infantil, cuatro vías de cada nivel, tendrán que desplazarse al nuevo edificio de Primaria que este jueves se ha estrenado. Lo harán por "unos caminos que están hechos por el recreo", ha detallado Ferera, al inmueble de Primaria en el que cada clase tiene un espacio asignado. En estas instalaciones, la planta baja a pie de calle se quedará vacía y todas las personas se ubicarán en el primer y el segundo piso.
Vuelta a clase bajo paraguas y con "algo de miedo"
Aunque este jueves ha amanecido despejado y soleado, los padres y los pequeños han acudido al María Zambrano con paraguas en señal de protesta por unas medidas de seguridad que consideran "insuficientes". Se ha levantado un muro de 1,20 metros, pero critican que no se ha construido el cauce seco para desviar el agua ni han monitorizado el caudal de las avenidas. Las familias han llevado los carteles por un colegio seguro y por la reubicación del centro con los que han participado en las movilizaciones que se han sucedido este verano.
"Somos de Torrero y aunque estrenamos colegio porque decidimos cambiar a uno público lo hacemos con algo de miedo", reconocían Diana Rey y Abel Cameo, que llevaban de la mano a Iria de 5 años. "Nos encanta el centro, público, nuevo, con un proyecto educativo atractivo, pero no tengo claro que el muro que han levantado aprisa y corriendo no vaya a filtrar agua en caso de una tormenta torrencial. Y eso que soy de Galicia y estoy acostumbrada a la lluvia", relataba esta madre. "Estamos en un limbo y con mucha incertidumbre", describía sobre su estado de ánimo.
El estreno de la primera fase del edificio de Primaria, después de que los escolares hayan permanecido tres cursos en barracones, ha quedado completamente empañada. "El día que haya lluvia nos tendremos que pensar si los traemos o no a clase. Las medidas no están a la altura de lo ocurrido. Si los responsables políticos tuvieran aquí sus despachos no sé si vendrían", reprochaba Carlos Garcés mientras esperaba que su hija mayor entrara en nuevo aula de Primaria y la pequeña le tiraba de la mano para ir a su aula de Infantil.
DGA: "Con una tormenta igual no entraría una gota"
La consejera de Educación, Ciencia y Universidades, Claudia Pérez Forniés, que ha vivido su primera vuelta a las aulas en el colegio Pintor Pradilla en Villanueva de Gállego, ha defendido las medidas de seguridad que se han adoptado. "Se ha levantado durante los dos meses de verano un muro de la medida que dicen los dos informes técnicos, que es de un 1,20 metros. Esto significa que si hubiera una tormenta como la que ocurrió el 6 de julio no entraría una gota de agua al colegio", ha asegurado.
No obstante, ha añadido que el Ayuntamiento de Zaragoza tiene previsto "en un plazo breve de tiempo" acometer obras también el barrio. "Va a hacer unas canalizaciones en la parte de arriba y un plan muchísimo más complejo que las familias estuvieron viendo, se lo estuvieron explicando con los planos encima de la mesa", ha subrayado. En relación con el plan de evacuación que el equipo directivo ha recibido en las últimas horas, ha reconocido que era "fundamental" que lo conocieran desde el primer día de clase.
Pérez Forniés, ha apuntado que entiende "la preocupación de las familias" y ha señalado que a los padres que han optado por cambiar de escuela a sus hijos "se les ha asignado el colegio que ellos han querido, independientemente del distrito". Educación manejaba que había 23 familias en esta situación, pero los últimos datos que manejaba el equipo directivo rebaja esta cifra a 11 o 12 a falta de cerrar los últimos datos.
