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Pueblos bonitos en el Pirineo aragonés por valles: de Gistaín a Bisaurri
Localidades de arquitectura pirenaica tradicional, con curiosidades desconocidas y entornos donde disfrutar de la naturaleza se reparten a lo ancho del Pirineo.
Las nevadas en el Pirineo aragonés han vestido de blanco a sus pueblos en las últimas semanas dejando asombrosas estampas. Y es que la nieve se muestra como un gran atractivo del turismo en la cordillera pirenaica, tanto por el reclamo deportivo de sus estaciones de esquí como el patrimonial de la belleza de sus valles. Imprescindible en esta época del año es consultar el estado de las carreteras y prestar atención a los consejos y obligaciones que las condiciones de las vías puedan requerir en caso de nieve.
En su ancho, de valle a valle, el Pirineo abre un enorme abanico de posibilidades que dificulta la elección del destino para una escapada de fin de semana o festividad. Independientemente de la localidad seleccionada, el acierto está asegurado. Desde pueblos rodeados de montañas, cascos urbanos empedrados, casas uniformes con tejados de pizarra y fuentes de senderos rodeados de naturaleza, desvelamos algunas opciones.
Qué ver en Siresa, en el valle de Hecho
La iglesia y la ermita distribuyen los barrios de esta pequeña localidad situada en el valle de Hecho, nutrida de calles empedradas y recoletas plazas que guían sus edificios de piedra. El monasterio románico de San Pedro de Siresa fotografía su mejor panorámica. Como anécdota, entre sus paredes fue educado Alfonso I El Batallador, rey de Aragón y de Pamplona entre 1104 y 1134. Siresa se ubica a solo 15 kilómetros la Selva de Oza, un imperdible entorno natural
Qué ver en Gistaín, en el valle de Chistau
Al margen derecha del río Cinqueta se eleva el popularmente conocido como el pueblo de las tres torres. Los prados que rodean la localidad, bajo un manto blanco en esta época del año, simulan un mar donde navegar hacia las bordas de Biadós y Tabernes. Las fiestas tradicionales de Gistaín, como los carnavales, destacan como fechas en las que rendir visita. Forma parte del Parque Natural Posets Maladeta, así que la zona asegura recomendables excursiones y rutas para los amantes de los caminos.
Qué ver en Piedrafita de Jaca, en el valle de Tena
Custodiado por la Peña Telera, Piedrafita de Jaca, municipio perteneciente al valle de Tena está repleto de espacios naturales como el bosque del Betato, entre otros a los pies de Sierra de Partacua. Visita obligada, como actividad para hacer con niños, es el recorrido del Parque Faunístico Lacuniacha.
Qué ver en Boltaña, en el valle de Ordesa
Su condición de capital del Sobrarbe nos indica su importancia en la zona, a orillas del río Ara. Sus estrechas calles envueltas en una arquitectura tradicional permiten al visitante perderse entre casas de piedra, faroles de cuento y balcones sugerentes. La colegiata de San Pedro, los restos del castillo del siglo XI y su muralla en lo alto de la localidad son otros recursos patrimoniales para visitar, sin obviar los parajes naturales que rodean a Boltaña.
Qué ver en Bisaurri, en el valle de Benasque
La iglesia parroquial de origen románico, maridada con un estilo renacentista tras su remodelación en el siglo XVI, es uno de los símbolos de esta pequeña localidad del valle de Benasque. A los pies del Coll de Fadas, en un entorno que hace las maravillas del Pirineo, Bisaurri reúne el aroma arquitectónico pirenaico. Como detalle, en este pueblo se encuentra la planta embotelladora de la popular agua mineral de la marca Veri.
