Consejos "vitales" para conducir con fuerte viento

Levantar el pie del acelerador, contravolantar con suavidad y evitar cualquier distracción, sobre todo el uso del móvil, son algunas de las recomendaciones para circular de forma segura cuando soplan fuertes rachas de viento.

Cómo actuar a la hora de adelantar a un camión o autobús cuando sopla fuerte viento.
Cómo actuar a la hora de adelantar a un camión o autobús cuando sopla fuerte viento.
Isidro Gil

 

Las estadísticas de la DGT señalan al viento como un enemigo declarado del conductor, con una media de 350 accidentes vinculados cada invierno a este fenómeno en España. Pero, ¿sabemos cómo actuar cuando una fuerte racha zarandea o desplaza nuestro vehículo varios metros? La Aemet ha puesto en alerta estos días a gran parte de la Comunidad -Pirineo, Gúdar, Maestrazgo, Albarracín, Jiloca, Ribera del Ebro, Cinco Villas y Bajo Aragón-, por lo que conviene saber qué recomiendan los expertos a la hora de ponerse al volante. En cualquier caso, las máximas son tres: reducir la velocidad, aumentar las distancias de seguridad en los adelantamientos y evitar la conducción errática que provocan las distracciones (como por ejemplo, el uso del móvil).

Como explica el técnico en seguridad Vial Josema Vallejo, lo más importante es “prevenir y mantener siempre la calma”. “Si estamos conduciendo con rachas de viento, hay que prever que podremos notar sacudidas al adelantar a un camión o autobús, salir de un túnel o sobrepasar una zona boscosa o de edificios”, explica. Basándose en su experiencia, recuerda que los accidentes de turismos son poco habituales en Aragón. “Es más el susto”, dice. “Sin embargo, el viento sí tiene bastante más incidencia en la siniestralidad de motos y camiones -añade-, con algunos vuelcos y caídas graves”.

¿Por qué hay que reducir la velocidad? Como recuerda la propia DGT, al aminorar la velocidad, todo pasa más despacio, el vehículo es más controlable y necesita menos metros para detenerse. Además, con marchas más cortas, se vence mejor la resistencia del viento. “A más velocidad, más sensible será nuestro vehículo al efecto del viento. Por ello, si normalmente circulamos por una autovía a 120, lo aconsejable sería bajar a 100. Nunca reducir de forma brusca o a velocidades especialmente bajas, porque podríamos provocar una colisión por alcance”, apunta el especialista de la Benemérita.

El efecto de las fuertes rachas laterales se aprecia sobre todo al adelantar en carretera a vehículos voluminosos. Especialmente, cuando el viento viene desde la derecha (lado del copiloto). En estos casos, los expertos recomiendan lo siguiente: sujetar con firmeza el volante cuando iniciamos la maniobra y pasamos al carril izquierdo, puesto que el viento nos va a empujar; controlar la velocidad mientras rebasamos al camión o autobús, puesto que el efecto pantalla del remolque nos protege y hace correr algo más; mantener la mayor distancia de seguridad lateral posible; instantes antes de superar al otro vehículo, cargar el peso de las muñecas que tenemos sobre el volante ligeramente hacia la derecha, para compensar la sacudida; y mantener la calma aunque el viento nos desplace unos metros al regresar al carril derecho. Porque esa sensación de inestabilidad desaparecerá enseguida.

Lo mismo que hay que anticiparse al viento en los adelantamientos, de igual forma deberemos hacerlo al salir de un túnel o de una zona de árboles. “Conviene fijarse de que lado soplan las rachas, para una vez desprotegidos, contravirar con suavidad hacia el lugar del que viene el viento”, señala Alberto Antón Rojo, quien imparte cursos de conducción segura y evasiva a los agentes de la Policía.

El especialista del Cuerpo Nacional recuerda que el viento no solo complica la circulación en carretera, sino también en zonas urbanas. “Las distracciones al volante han de evitarse siempre, pero la concentración debe ser máxima cuando sopla el viento. En cualquier momento, nos podemos encontrar con una rama o un contenedor de basura en la calzada, o con una bolsa de plástico en el parabrisas”, señala. En el caso de los motoristas, el experto recomienda circular siempre por el centro del carril. “De esta forma, tenemos cierto margen de reacción ante una sacudida”, precisa.

Las populares mangas de viento de color rojo y blanco han ido desapareciendo poco a poco de la red viaria. Pero la DGT cuenta ahora con sofisticadas estaciones meteorológicas a pie de carretera que, al estar conectadas a los paneles luminosos, lanzan mensajes de forma inmediata a los conductores ante cualquier incidencia. Como explicaban desde el centro de gestión de la capital aragonesa, este lunes los anemómetros detectaron vientos de cerca de 7 metros por segundo en puntos de Zaragoza, Zuera o Jaca, lo que ha activado los paneles de la A-23.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión