La oferta de los hoteles sin niños también cala en Aragón

Varios hoteles, balnearios y casas rurales no admiten niños. Ofrecen más tranquilidad y descanso para sus clientes.

Hotel Barosse, uno de los primeros de Aragón solo para adultos.
Hotel Barosse, uno de los primeros de Aragón solo para adultos.

El lujoso Balneario de Segura de Baños, que acaba de abrir sus puertas este verano, no admite niños. Y no es el único establecimiento hotelero de Aragón "solo para adultos". Esta tendencia extendida en los últimos años en destinos turísticos de playa también ha arraigado en la comunidad autónoma aragonesa. Cerca de una decena de hoteles y casas rurales aragonesas apuesta por esta oferta turística segmentada.

"Descubre el lujo de la calma", anuncia el nuevo balneario de cinco estrellas de Segura de Baños. "Nuestro público busca descanso, desconexión y disfrutar de un entorno natural muy especial. Queríamos evitar a los niños corriendo y gritando, que no aportan calma. Desde el principio tuvimos clara nuestra apuesta por ser un establecimiento solo para adultos. La gente lo entiende y nuestra propuesta ha sido muy bien acogida. Somos el único balneario de España de estas características", afirma su director, Javier Vázquez, con amplia experiencia en el sector hostelero.

El balneario abrió al público el pasado 1 de agosto, después de un largo proceso y espera. "Estamos contentos de estos dos primeros meses. A los clientes les gustan nuestras instalaciones y destacan que es un paisaje maravilloso. El público es variado, de todas las edades. Entre los clientes vienen parejas que dejan a los hijos en casa y quieren desconectar unos días sin niños", apunta Javier Vázquez. Aceptan menores a partir de 16 años, aunque en ocasiones hacen excepciones.

Aparte de este balneario, los alojamientos solo para adultos de Aragón suelen ser pequeños hoteles rurales en pueblos y en parajes naturales singulares, como la Casa Arcas de Villanova, el Hotel Barosse (en Barós), el Acebo de Casa Muria (Renanué) o Las Moradas del Temple (Mirambel). Algunos han decidido reconvertir su oferta en los últimos años.

Dudas legales al principio

Uno de los primeros fue el Hotel Barosse, en Barós (perteneciente al municipio de Jaca), que lleva 12 años abierto y cuatro con la fórmula solo para adultos. "Somos un hotel pequeño, de cinco habitaciones. La mayoría de nuestros clientes buscaban tranquilidad y relax. La convivencia con los niños era difícil, porque lógicamente estos son movidos, hacen ruido, los bebés lloran. Y decidimos hacer una apuesta y especializarnos solo en adultos que buscan una desconexión o un momento romántico", explica Gustavo Piedrafita, dueño del Hotel Barosse.

"No tenemos nada contra los niños y las familias. Solo hemos hecho esta apuesta por un tipo de cliente. Cada uno hace sus apuestas y se especializa. Nosotros buscamos la calidad y cuidamos mucho los detalles. La respuesta de nuestros clientes ha sido muy positiva. Muchos de ellos tienen hijos y nos lo agradecen", subraya Gustavo.

Este hostelero reconoce que al principio tuvieron dudas legales. "Consultamos a la comarca de la Jacetania si había algún problema por restringir la edad de nuestros clientes (aceptan a partir de 14 años). Inicialmente desde el Gobierno de Aragón nos contestaron que no era posible, pero después esta fórmula se ha extendido por muchas comunidades autónomas y no ha habido ningún problema", señala.

También en la ciudad

La oferta de hoteles para adultos en España se ha multiplicado en España en los últimos tres años. La mayoría son hoteles de lujo en zonas de playa (Canarias y Baleares a la cabeza, según varios portales de internet). También hay pequeños hoteles rurales, como los ejemplos del Pirineo aragonés. Y últimamente se han sumado hoteles urbanos con clientes de negocios, como el Hotel Delicias de Zaragoza.

"El hotel cambió de dueños y se reformó en 2015. Desde entonces se cambió la oferta y no se aceptan niños menores de 10 años, sobre todo por motivos de espacio. Las habitaciones son pequeñas y no hay sitio para cunas ni camas supletorias", explican desde este hotel, situado cerca de la estación intermodal y que busca captar clientes de viaje de negocios.

Una familia que viajaba con un niño menor de 10 años puso una reclamación hace una semana porque tras haber hecho una reserva por internet no les dejaron alojarse con su hijo. "Nuestra información es muy clara, tanto en internet como cuando alguien llama para reservar una habitación. Esta familia podría haber elegido otro hotel. No hemos tenido más quejas", aseguran. En el portal Booking (a través del cual reservó la familia) informan de que no admiten a menores de 10 años.

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