Aunque la consejera detalló su hoja de ruta, que pasa por reducir la desigualdad, crear empleo de calidad, restablecer la confianza en el Inaem, unificar las ayudas a la internacionalización o modernizar el modelo productivo, entre otras cuestiones, tanto IU-CHA y Podemos como Ciudadanos o el PAR le reclamaron concreción tanto en disponibilidad presupuestaria como en plazos. "¿Quién no va a estar de acuerdo con lo que dice de combatir la desigualdad y crear empleo estable?", le espetó Patricia Luquin, portavoz del grupo parlamentario mixto, conformado por CHA e IU. "No le pido que haga milagros, pero sí que acelere los objetivos y me preocupa que no de ningún plazo ni hable de los recursos de que dispone", agregó.

También el diputado de Ciudadanos (C’s) Javier Martínez le reprochó la falta de concreción. "La Comunidad se encuentra en una situación de emergencia social y entendemos que no es momento de ideologías sino de aportar soluciones". Pidió también a la consejera socialista que "dejen de discutir con el PP de si esto se hizo peor antes que ahora y sean audaces y valientes para trabajar con los recursos disponibles, los que sean, que sabemos que son escasos". Directo fue también el diputado del PAR, Jesús Guerrero, que le pidió conocer en detalle qué estrategia pensaba seguir pasados ya 65 días de su llegada al poder, lanzándole a continuación una batería de preguntas sobre el plan energético, el de la minería o la Travesía Central por el Pirineo. Su interrrogatorio abundó en cómo iba a procurar atraer inversiones o qué planes tenía para proyectos singulares de Aragón como Motorland, la nieve, Walqa, Platea y el resto de las plataformas logísticas, incluida Plaza.

Tampoco se fue por las ramas Román Sierra, diputado de Podemos, que exigió para empezar a hacer política económica clarificar la deuda que tiene el Gobierno de Aragón. "Las instituciones deben liderar el cambio del modelo productivo", pero "para ello se necesitan presupuestos y los actuales están secuestrados por una deuda que debería ser auditada para determinar su legitimidad". Mostrándose crítico con la decisión de abrir el comercio 11 festivos en 2016 –"que responde a la lógica económica que nos ha llevado al desastre"–, Sierra exigió que el derecho al empleo de calidad sea una cuestión de primer orden para el Gobierno.

Del resto de la oposición se desmarcó el diputado del PP Ricardo Oliván, que más que concreción, a lo que instó a la consejera es a abogar por la "continuidad y no la ruptura de las políticas" que, a su juicio, han hecho posible la mejoría económica. Conminando a la consejera a "no dejar pasar el tren de la recuperación", le advirtió "que puede truncarse por la inestabilidad política".

El bálsamo en esta primera comparecencia de la consejera lo puso la diputada del PSOE, Leticia Soria, que aplaudió el debate generado y el hecho de que Economía e Industria vayan "de la mano" en el departamento ya que es "la forma más directa de reactivar la actividad económica".

En el turno de réplica, que se alargó bastante más de los quince minutos permitidos, la consejera Gastón le contestó a la oposición que "65 días –en alusión directa al diputado del PAR –son pocos (frente a los 20 años que han estado ustedes) para evaluar, clarificar y establecer una hoja de ruta" y en cuanto a la exigencia de concreción, argumentó que, "por prudencia, no vamos a generar falsas expectativas sino a decir la verdad". En este sentido, insistió en que "antes de conocer las consignaciones presupuestarias" –y eso, recordó, es cometido del consejero de Hacienda– y "de un anteproyecto de presupuestos que se debatirá en esta sede, no voy a decir más sino que lucharé por contar con partidas" suficientes. Eso sí, dejó claro que "el margen de maniobra es nulo hasta tener el próximo presupuesto". Al diputado del PP, Marta Gastón le contestó sin ambages a su petición de dar continuidad a las políticas del anterior Gobierno. "Si me pregunta por el único hilo conductor que han tenido, que es el de la tijera, le digo ya que no y que tampoco es momento para meter miedo", concluyó.