Que te comienzo a escribir y no sé cómo parar

loco me tienes desde que te empecé a escuchar

esas historias de un caballero,

que lucha por el mundo entero.

Esas historias de un enamorado

que varias veces es rechazado

o de veleros veloces

que surcan los mares más precoces.

Esas historias de feroces batallas

en las que el enemigo nunca cruzaba las murallas

o de un afortunado marinero

que en los cofres encontraba joyas y dinero.

Había menos suerte

cuando me hablabas de la muerte

que no hay mucha gente que la tiente

ni siquiera el más valiente.

En honor a San Jorge que mató al dragón

me suena a mí que por Aragón

y nos ganó el corazón

convirtiéndose en nuestro patrón.

Y con esto acabo el relato

aunque más bien era poesía

me ha llevado un rato

pero la verdad es que lo merecía.