Casi 30.000 familias aragonesas pasan a vivir de alquiler en los últimos dos años

Sea por imperativo de la crisis económica, sea por cambio de mentalidad, el modo de vida de los aragoneses cambia a marchas forzadas. En concreto, en lo que se refiere al régimen de tenencia de la vivienda. Solo en los dos últimos años, casi 30.000 familias de la Comunidad han pasado a vivir de alquiler, según los datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En total, 92.083 hogares aragoneses son ya inquilinos y deben pagar cada mes un alquiler a su casero, lo que representa el 17,1% del total, un porcentaje que no ha dejado de crecer desde que estallara la burbuja inmobiliaria, y el paro y la dificultad de acceso a créditos hipotecarios marcaran la economía de la Comunidad. Hace dos años, la cifra se quedaba en poco más de 62.000.

Se trata de un porcentaje todavía muy bajo si se compara con otros países europeos. En Suiza, por ejemplo, más de la mitad de sus habitantes viven en régimen de alquiler (55%), y algo menos en Alemania (47%), Austria (42%) o Francia (38%).

En cualquier caso, la ruptura es clara en los últimos años. Cada vez más familias optan por -o se ven obligadas a- depender de un inquilino. A esta situación ha contribuido, entre otros factores, el precio del alquiler, que sigue una tendencia descendente. El pasado 2014 acumuló otra caída del 1,4% en Aragón, mientras que en el conjunto del país bajó un 0,6%.

La inestabilidad laboral, la caída de los sueldos y el cierre del grifo bancario –la firma de hipotecas cerró el pasado año con una caída del 14,3%- obligan a los jóvenes a recurrir a esta forma de residir en una casa.

Además, el perfil de las personas que viven de alquiler ha cambiado en los últimos años, y cada vez son más las familias asentadas y con hijos que deben recurrir al arrendamiento para poder seguir adelante.

Una realidad que ha sacudido el mercado inmobiliario. El año pasado tan solo se tramitaron 297 visados de obra nueva para levantar edificios de viviendas en Aragón, una cifra que se superaba con facilidad en un solo mes antes de la crisis. Además, de esas casi 300 obras nuevas, la mayoría, un total de 237, hacen referencia a unifamiliares aislados. A ellas hay que sumar 14 unifamiliares adosados y 46 edificios de bloque.

Vivienda social

De ahí que buena parte de los esfuerzos de la Administración y de las reclamaciones sociales de la ciudadanía pasen por reforzar las políticas de fomento del alquiler. Por ejemplo, el Gobierno de Aragón ha aprobado un nuevo plan de ayudas a inquilinos (con un presupuesto de 4,7 millones de euros).

Es el tercer año que sale adelante este programa. En 2014, hubo 918 beneficiarios, mientras que en 2013 se concedieron 1.906 ayudas. Este año se ha aumentado la partida presupuestaria, que pasa de 1,2 millones de euros en 2014 a 4,7 millones de euros en 2015, gracias a un acuerdo con el Ministerio de Fomento. Sin embargo, colectivos como la Plataforma de los Profesionales de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Zaragoza denuncian que hay beneficiarios con la ayuda concedida el año pasado y esperando al menos desde agosto para cobrar.

Las más caras y las más baratas

Por otro lado, y en relación al precio de los arrendamientos de vivienda, Tecnitasa ha presentado su informe anual de máximos y mínimos, en el que refleja cuáles son las calles más caras y las más económicas para vivir de alquiler en España. La calle más exclusiva del país sigue siendo Serrano, en Madrid, cuyo precio permanece estable. El metro cuadrado en esta vía alcanza los 32 euros al mes, con un coste de 5.750 euros por una vivienda de 180 metros cuadrados.

La segunda posición la ocupa el Paseo de Gracia de Barcelona donde el metro cuadrado se sitúa en 29 euros. En Aragón, el primer puesto lo ocupa una vez más el paseo de la Independencia, donde se llegan a pagar 14 euros por metro cuadrado.

En el lado opuesto, el de las viviendas más baratas, se sitúan la zona del Perpetuo Socorro de Huesca a 2,9 euros al mes por metro cuadrado. Aunque las más baratas se ubican en la zona del Estadio de Castellón, donde una vivienda puede costar 119 euros al mes (1,70€/m2). Le sigue el Barrio Carrús, en Elche donde el metro cuadrado al mes cuesta 1,80 euros, y el barrio Juan XXIII en Alicante, donde está a 2 euros.

Más información específica sobre vivienda

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