Los dependientes que reciben prestaciones descienden más de un 30% en cinco años

Las ayudas económicas se reducen notablemente mientras que los servicios sociales se mantienen.

Los mayores suelen ser, generalmente, los que más servicios por dependencia necesitan.
Los dependientes que reciben prestaciones descienden más de un 30% en cinco años
Luis Ángel Tejedor

Los recortes en el sistema de dependencia son una constante de nuestros días. Desde hace varios años, los servicios sociales reclaman las grandes deficiencias que se han producido en Aragón, que ha pasado de ser una de las comunidades referentes en el momento de su implantación a convertirse en una de las peores valoradas en la actualidad. Ejemplo de ello es la ponencia elaborada por tres expertos aragoneses de la Universidad de Zaragoza: María del Mar Rincón, Ángel Sanz y Ana Cristina Romea, que llevan varios años trabajando sobre el tema.


“En estos años hemos perdido muchos beneficiarios de prestaciones y cada vez hay más gente en lista de espera que tienen reconocida una dependencia pero no acceso a ella”, señala Ángel Sanz, profesor jubilado de la Facultad de Ciencias Sociales y del Trabajo de la Universidad de Zaragoza. En estos momentos, solamente 17.314 personas reciben una prestación por dependencia en Aragón, una cifra ligeramente inferior a la de hace un año, cuando había 18.502 beneficiarios. Asimismo, se encuentra muy por debajo de los datos que se manejaban en 2010, momento en el que se daban 25.434 ayudas. En concreto, en este lustro han descendido en un 32%.


Las prestaciones se dividen entre servicios (centros de día y residencias) y económicas. Mientras que en este periodo las de servicio casi no se han visto modificadas, las ayudas económicas han menguado considerablemente. En estos años se ha pasado de tener 20.956 beneficiarios de este tipo a 12.831, un 38,7% menos. “Las prestaciones económicas se encuentran suspendidas, por lo que no hacen más que reducirse debido al número de fallecimientos”, recalca Sanz.


La ley de dependencia aprobada en 2006 ya priorizaba los servicios respecto a las prestaciones económicas, "pero desde que llegó el Gobierno de Rajoy se han paralizado las económicas y no se han impulsado las de servicios”. Al mismo tiempo, Sanz explica que la reforma de la ley que se llevó a cabo en 2012 no hizo más que acentuar estas diferencias. “Desde entonces existe la posibilidad de que las prestaciones económicas se puedan retrasar hasta dos años sin que nadie lo pueda reclamar”, recuerda.


Otro de los problemas que destacan es que en Aragón no se gestiona ni la telesasistencia ni la ayuda a domicilio para las personas con dependencia. Algunos municipios cuentan con estos servicios pero no están ligados a la situación de dependencia legal que tienen las personas que los solicitan. “Desde hace varios meses se está negociando para que las comarcas y entidades municipales se hagan cargo de la gestión del Servicio de Ayuda a Domicilio”, destaca Sanz. Sin embargo, hasta hace un mes solo el 44% de las comarcas, municipios y entidades equivalentes habían dado el visto bueno.

Aumento de las plazas concertadas

El informe, que extrae los datos de las estadísticas oficiales, recalca los problemas que está teniendo la gente para acceder a las plazas de residencias. Desde 2010 a 2013 se han perdido cerca de 500 plazas de residencias en Aragón. Además, se está produciendo otro efecto, el crecimiento desmesurado de las concertadas. “Es una pena que teniendo la posibilidad de desarrollar las infraestructuras públicas se ha optado por concertarlas con redes privadas lo que provoca que aunque haya más plazas, se dependa totalmente del estado del mercado”, subraya.


Por su parte, los centros de día aumentan sus plazas un 33% en los tres años ya mencionados. El crecimiento se produce fundamentalmente en las privadas, cuyo peso ahora supone casi un 81% frente al 19% de las públicas o que funcionan como tales para el sistema de dependencia.

Una lista de espera sin fin

Según los datos del Sistema para la Autonomía y la Atención a la Dependencia (SAAD), en octubre de 2014 había en Aragón 17.314 personas beneficiarias de la ley de dependencia y, al mismo tiempo, existían 7.549 que todavía estaban en lista de espera, a pesar de que se les ha reconocido el derecho. Mientras que los primeros suponen el 69,63% del total, los segundos, que empezarán a beneficiarse en verano, conforman el 30,36%. Unas cifras muy diferentes a las que se ven en el total de España. En este caso, el 81,03% ya tienen las ayudas que les corresponden, mientras que solo el 18,97% está en la lista de espera.