La Universidad de Zaragoza pierde más de 2.000 estudiantes de primer ciclo en un año

La subida de tasas académicas y la reducción de las becas son algunas de las razones de este descenso.

El 52% de los jóvenes españoles vivió con sus padres mientras cursaban sus estudios universitarios.
La Universidad de Zaragoza pierde más de 2.000 estudiantes de primer ciclo en un año
Heraldo

Después del gran incremento de universitarios que se produjo al comienzo de la crisis económica, la institución académica lleva acumulando tres años de continuos descensos. Sin embargo, ninguno ha sido tan acusado como el que se ha producido durante este curso académico. Mientras que el año pasado, en el curso 2013-2014 había 30.904 estudiantes matriculados en las nuevas titulaciones de grado y las antiguas de diplomaturas y licenciaturas, esta cifra se ha reducido hasta los 28.718 alumnos registrados en la actualidad.


“Es un dato que preocupa bastante a la Universidad, aunque no genera alarma todavía”, sostiene Fernando Beltrán, vicerrector de Política Académica. Al mismo tiempo, asegura que las razones que motivan este descenso de alumnado son claras: la falta de recursos económicos para poder pagar una titulación. Y es que, durante estos años, los estudiantes han sufrido una subida continuada de las tasas académicas. En los últimos tres cursos han crecido casi un 10%, suponiendo un gasto de entre 71 a 134 euros más cada año, siempre y cuando sea la primera vez que se matricula de cada asignatura.


Otro de los problemas que han vivido los universitarios ha sido el endurecimiento de las condiciones para acceder a una beca y la nueva disposición que han adoptado. Ejemplo de ello es que se ha reducido por primera vez en los últimos seis años el número de solicitantes para tener una beca. Al mismo tiempo, se produce un descenso en la cuantía de estas para que con cantidades similares a las de años anteriores se consiga llegar a un mayor número de alumnos. Mientras que en el curso 2012/2013 accedieron 5.560 alumnos a una beca, al año siguiente lo consiguieron casi 800 más, llegando a los 6.334 alumnos.


Por el contrario, el dinero que recibieron fue mucho inferior. Los alumnos han pasado de cobrar una media de 1.944,31 euros por alumno, más el pago de la matrícula, a percibir casi 400 euros menos, en concreto, 1.558,68. Este hecho ya lleva provocando varios años el abandono de alumnos que no pueden pagar la matrícula. La Universidad de Zaragoza no puede cuantificarlos, pero sí que detecta que este problema se está produciendo. Así, que el descenso puede ser por estudiantes que han dejado la carrera a mitad de sus estudios por problemas económicos o que ni siquiera han podido empezarlos por el alto gasto que suponen.

Las ingenierías, la rama que más alumnos pierde

El año pasado fue el último para la gran mayoría de las licenciaturas y diplomaturas, lo que provoca que haya menos plazas disponibles, aunque algunas que ya se encuentran en trámites de extinción siguen teniendo todavía alumnos. A este hecho hay que unirle la decisión de la Universidad de Zaragoza de disminuir el número de plazas que oferta para cumplir los parámetros exigidos por la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca), que asegura la calidad de las enseñanzas españolas. De este modo, la institución académica ha reducido casi 200 plazas en este curso académico.


Aún así, más de 1.800 alumnos han decidido no matricularse en la universidad y la rama que más ha notado este descenso ha sido la de las ingenierías, que entre las sedes de Zaragoza, La Almunia, Huesca y Teruel ha perdido unos 800 estudiantes. Por su parte, el sector educativo es el que menos ha notado el descenso de alumnos, solamente han sido 36 alumnos entre las facultades de Zaragoza y Teruel. Al mismo tiempo se ha producido un incremento de 31 en la de Huesca, por lo que este departamento solo ha perdido 5 personas.


La Facultad de Educación de Huesca y el Centro Universitario de la Defensa de Zaragoza han sido las únicas que han visto cómo sus matriculados aumentaban durante este último curso. La primera recibió 31 alumnos nuevos, mientras que la segunda consiguió 123, todo un hito teniendo en cuenta la situación en la que se encuentra la institución académica.