Potajes de autor para tapear

La Asociación de Empresarios Turísticos organiza por quinto año ‘La ruta del perolico’, una propuesta a la que se han sumado 40 establecimientos.

El cocinero del restaurante Venecia con uno de los perolicos. joge escudero
Potajes de autor para tapear
joge escudero

En la barra y por 1,50 euros. Así se pueden degustar en 40 establecimientos de Teruel capital y provincia sopas y potajes elaborados con materias primas ligadas a la tierra.


‘La ruta del perolico’, como así se llama la iniciativa que la Asociación de Empresarios Turísticos promueve desde hace cinco años, ha resultado en esta edición todo un éxito. Una mayor participación de los hosteleros, pero también más afluencia de público permiten decir al presidente de los empresarios turísticos, Juan Ciércoles, que la actividad gastronómica "va calando entre la gente".


"Nuestra intención al crear la ruta –añadió– fue la de generar proyectos dinamizadores del sector en unas fechas especialmente apagadas y qué mejor oferta que platos calientes para el frío de Teruel". Ciércoles destaca que en este innovador muestrario de "cocina de cuchara" cada vez se implican más los hosteleros de la provincia, al principio algo reticentes al proyecto culinario. De tal manera que este año se han sumado 17 establecimientos de diferentes localidades turolenses.


Para Ciércoles, no obstante, tan importante es la cantidad como la calidad. La ruta está revestida de sabor y estética de la tierra empezando por su presentación: unos ‘perolicos’ o recipientes de cerámica tradicional verde y blanca de Teruel. En cuanto a los ingredientes, si bien se opta por la libertad de los restauradores a la hora de diseñar sus propuestas, la mayoría introduce guiños al producto cárnico estrella de la provincia: el porcino. "La verdad es que hemos hecho una gran apuesta por la calidad, con platos que son auténticos perolicos de diseño", explicaba el presidente de los hosteleros.


En esta ruta de tapeo de cuchara se pueden saborear cocidos tradicionales, pero también obras de autor. Hay reinterpretaciones de las clásicas sopas de ajo aragonesas, pucheros marineros que transportan a la esencia de las zonas de costa o cremas que evocan los aromas de la tierra.


Alberto García, cocinero y propietario del restaurante Venecia, ha creado uno de los perolicos más apreciados de la ruta: una sopa de setas de cardo y trufa que hasta ahora ha sido saboreada ya por más de un centenar de personas. "Este año veo más movimiento, porque, probablemente, la iniciativa se va consolidando", explicaba el hostelero. El chef valora positivamente esta actividad, ya que, según afirma, "el público se mueve en cuanto se ofrecen proyectos novedosos".