REIVINDICACIÓN

Los transexuales, protagonistas en el día del orgullo gay

Los colectivos zaragozanos se suman a una campaña mundial para que la transexualidad salga de la lista de enfermedades de la OMS.

Una enorme bandera arcoiris encabezó la marcha que partió de la plaza de San Miguel.
Los transexuales, protagonistas en el día del orgullo gay
TONI GALáN/A PHOTO AGENCY

Mucha bandera arcoiris, licra prieta, alguna que otra boa de plumas, pero -sobre todo- un mensaje serio y comprometido contra la exclusión social y con la exigencia de que la Organización Mundial de la Salud saque la transexualidad de su listado de patologías.


Centenares de zaragozanos, bajo el lema 'Derechos iguales a cuerpos diversos', celebraron ayer el día el orgullo gay con una manifestación que comenzó en la plaza de San Miguel y recorrió las calles del centro en un ambiente festivo. Batucada a cargo de Troko Bloko, abanicos flamencos e, incluso, un armario de cartón para hacer 'performances' animaron una marcha en la que se habló desde la reciente aprobación del matrimonio homosexual en Portugal hasta temas un poco más 'petardos' como la portada de 'Interviú' con el primer desnudo masculino de la historia. "¿La de Jesús Vázquez? Pero menuda 'engañufla', si sale más vestido de lo que venimos nosotras aquí", se quejaba una 'reinona' que se hacía llamar Itziar.


En el apartado reivindicativo, tal y como plasmaba el manifiesto, se destacó que la crisis actual puede empeorar la exclusión social, sobre todo, de las "identidades que se salgan de la norma binaria". En Zaragoza y en centenares de ciudades del Planeta, el día del orgullo gay (aunque también intersexual, lésbico, bisexual y 'queer') puso ayer el acento en los transexuales, porque una campaña de presión internacional aspira a que deje de considerarse una patología que precisa de control psiquiátrico. "Los transexuales conforman el colectivo más discriminado social y laboralmente, porque son invisibles y no tienen salidas: sus únicas posibilidades están el espectáculo o la prostitución", denunciaba Julia Pérez, coordinadora de Magenta, junto a compañeros de Towanda, LGTB y otros colectivos. Todos recordaron que hace más de veinte años la homosexualidad salió de los manuales de psiquiatría, donde estuvo catalogada como enfermedad mental, aunque lamentaron que en decenas de países aún es considerada una enfermedad que, incluso, se castiga con la muerte.


Los colectivos convocantes pidieron al Gobierno de Aragón "la inclusión de la diversidad afectivo-sexual en el sistema educativo (vía libros de texto) y en las políticas de bienestar social y familiar". Además, exigieron que los tratamientos para la reasignación de sexo sean gratuitos y se eliminen las listas de espera de hasta 24 meses. Varios partidos se sumaron a la marcha (CHA, IU o las juventudes socialistas estaban también entre los convocantes) y exigieron al PP que retire su recurso de inconstitucionalidad contra el matrimonio gay porque "desnaturalizaba la institución". En esta línea, se invitó a los ciudadanos y a los políticos a caminar hacia "la aceptación de la diversidad" y a rechazar la discriminación por la orientación sexual, así como la violencia y la opresión a la que conduce.