Ruta de los castillos y palacios en el Campo de Borja
Son varias las localidades de esta comarca donde se pueden encontrar este tipo de construcciones que forman parte de su patrimonio.
Además de por sus vinos, la comarca de Campo de Borja es también famosa por sus castillos y palacios. Estas construcciones son reflejo de las distintas épocas pasadas en esta zona de Zaragoza y también forman parte de su riqueza patrimonial. Actualmente, se conservan un total de 14 construcciones de este tipo (4 castillos y 10 palacios), en distintos pueblos de la comarca.
Borja es capital de comarca y también donde más palacios de la época renacentista se encuentran. Uno de ellos es el Palacio de los Vera, también conocido como la Casa de las Conchas. Se trata de una construcción del siglo XV situada en la parte medieval de la localidad. Es uno de los edificios de mayor importancia monumental dentro del amplio catálogo de arquitectura histórica que posee Borja.
El Palacio de Sánchez del Río es otro ejemplo. Perteneció antiguamente a los Alberite y fue levantado en el siglo XVI, aunque la fachada fue modificada después, hacia finales del XIX. En su interior se conserva un patio de columnas labradas en piedra y una galería de arcos de medio punto en ladrillo.
En las mismas fechas se construyó el Palacio de los Lázaro, actualmente llamado Palacio de Ojeda, también en Borja. Del inmueble destaca la puerta de acceso, en forma de arco; mientras que en el interior hay un patio de columnas anilladas y restos de una galería que lo rodea. En la calle Goya se localiza la casa o palacio de los Frontines, un edificio de la segunda mitad del siglo XIX que mantiene algunas estructuras interiores en hierro fundido de dicha época.
Por último, en la misma plaza del Ayuntamiento está la casa de los Pérez Petinto, con una fachada de ladrillo colocado a tizón abierta por una gran portada adintelada.
Además de los de Borja, en otras localidades de la comarca también hay palacios, algunos incluso de mayor antigüedad, como el de los abades de Veruela, en Ainzón. En este caso, el origen de los sillares de la torre podría ser romano. En Ambel se localiza el Palacio de Los Hospitalarios, un conjunto arquitectónico del siglo XIV que se levanta sobre el solar del castillo que existía en dicho lugar en el siglo XII. Se encuentra adosado a la iglesia de San Miguel.
En Bureta se encuentra el Palacio de los Condes de Bureta, convertido ahora en una casa museo que transporta al visitante a los siglos XVIII-XIX. Se organizan visitas teatralizadas, con el Conde de Bureta como guía, para recorrer más de 400 años de historia de España.
Mallén es otra de las localidades del Campo de Borja con más ejemplos de arquitectura civil. En ella se pueden encontrar restos del Palacio de Navas, un rincón típico y característico de la zona antigua del pueblo. En el número 29 de la calle de Tudela hay un edificio coronado por un blasón de grandes dimensiones de la familia Navas que recuerda la casa palaciega que en tiempos existió allí. Fue residencia del rey Carlos IV cuando visitó Mallén en 1802.
En la localidad también se puede admirar el Palacio de los Zapata, calificado como Monumento Nacional. Data del siglo XVIII y es de grandes proporciones, con una de las fachadas más notables de esta época de toda la zona.
Por su parte, en la comarca se conservan los restos de varios castillos. Uno de ellos es el de Bulbuente, también conocido como Palacio de los Abades de Veruela. El castillo es de origen musulmán y, sobre él, se construyó el posterior palacio, en estilo renacentista aragonés. Como resultado, en la actualidad es un castillo-palacio que perteneció a los abades de Veruela y que fue restaurado en 2021 para acondicionarlo como alojamiento turístico. También se hacen visitas guiadas y se organizan eventos.
En Talamantes se conservan los restos de un pequeño castillo roquero construido en mampostería. Su origen está en el año 1175 y, junto con los castillos de Ferrera y Ferrellón, realizaban el control del paso entre Castilla y Aragón, en la confluencia de los barrancos de Valdeherrera y Valdetreviño.
El castillo de Agón es uno de los más antiguos de la zona, ya que se sabe que existía ya en el año 1080. Perteneció a los Luna de Almonacid hasta 1413 y, después, al Conde de Contamina y Marqués de Bárboles. Por último, el castillo de Alberite de San Juan, una construcción de sillería sobre la antigua fortaleza musulmana.
En Grisel también se conserva un castillo del siglo xv, que ha sido restaurado por un particular y es sede de la asociación de Amigos de los Castillos de Aragón.
