El Gobierno de Aragón, en una primera y provisional evaluación de los daños ocasionados por la crecida del río Ebro a su paso por Zaragoza del pasado 2 de febrero, cifra en más de 8.000 las hectáreas afectadas, de las cuales más de 4.500 son de terreno agrícola.

Aunque esta época del año es la menos dañina para los posibles cultivos inundados, por la escasa o nula actividad vegetativa, existen cultivos, principalmente cereales de invierno y alfalfas, que se han visto especialmente afectados.

Para la cuantificación de la superficie inundada, se ha partido de la observación de las imágenes de radar tomadas vía satélite procesadas para dicha emergencia. En base a esta primera estimación de datos, en la siguiente tabla se pueden observar los términos municipales y tipología de superficies afectadas:

La observación de esa tabla permite concluir que de las más de 8000 hectáreas de superficie total inundada, más de 100 corresponden a superficie de leñoso, casi 1.300 de erial, algo mas de 1.500 has son forestales, y 480 has son de otras como viales, suelo urbano, infraestructuras de riego etc.

Se acompaña una segunda tabla en la que se han estimado los posibles cultivos que se puedan corresponder a esas superficies de cultivo, teniendo en cuenta las declaraciones de la PAC de 2014.

Una estimación que determina que los cultivos presentes son principalmente alfalfas y otras forrajeras, con cerca de 2.000 has afectadas, seguidas de cereales de invierno, con algo mas de 1.200 has, apareciendo también -aunque en mucha menor superficie- proteaginosas y leguminosas de invierno, con 34 has, y en escasa cuantía, hortícolas, con 69 has dañadas.

En cuanto a los daños producidos en explotaciones ganaderas, consta la evacuación de animales en al menos 5 de ellas: un cebadero de terneros en Utebo, uno en Fuentes de Ebro de ganado de lidia; dos en Alfajarín de ovejas y ganado de lidia; y un último en Alcalá de Ebro.

La crecida tuvo escasa repercusión en los cascos urbanos

El Departamento de Política Territorial e Interior activó el Plan de Emergencias por Inundaciones en fase de prealerta el viernes 30 de enero. Se movilizaron efectivos de Protección Civil de las comarcas de Campo de Borja, Ribera Alta del Ebro y Ribera Baja del Ebro y se alertó a las comarcas y Ayuntamientos de los municipios afectados, así como a Bomberos de la DPZ y del Ayuntamiento de Zaragoza, Guardia Civil, Carreteras y Policías Locales.

Durante la crecida se registraron afecciones en una decena de casas del municipio de Novillas, en las que llegaron a acumularse entre 30 y 50 centímetros de agua, si bien no fue necesario evacuar de forma permanente.

Sí fue necesario evacuar una vivienda aislada del barrio de Monzalbarba, facilitar la entrada y salida de los trabajadores de la residencia de ancianos de este barrio por la presencia de agua en los alrededores y ayudar a los vecinos de Alfocea para entrar y salir del barrio tras haber resultado anegada la carretera de acceso.

Además de estas afecciones y de las relativas a las zonas de cultivo, cabe

destacar las siguientes:

Rotura de las motas de Pontoneros y Monzalbarba

Corte de la carretera VP-5, de Novillas a la carretera de Tausre

Corte de la carretera CP-3, (Pradilla-Boquiñeni)

Corte de la carretera A-127, en el punto kilométrico 12

Inundación del parque de Novillas

Inundación de la explanada de las ferias en Gallur

Inundación del parque de Pradilla de Ebro

Filtración en la sima de Alcalá del Ebro

Corte de camino de acceso a Finca de La Alfranca por filtraciones por el subsuelo