FLORA Y FAUNA

La laguna del Cañizar sufre la mayor sequía desde su recuperación, hace ya tres años

La falta de lluvias durante el verano ha mermado la capacidad del acuífero del que se nutre el humedal.

La laguna del Cañizar
La laguna del Cañizar sufre la mayor sequía desde su recuperación, hace ya tres años
JORGE ESCUDERO

Los problemas de sequía que está padeciendo el campo turolense han afectado de lleno a la laguna del Cañizar, un humedal de 380 hectáreas, situado entre los términos municipales de Villarquemado y Cella, que fue objeto de una importante labor de recuperación tras permanecer desecado desde el siglo XVIII.


La laguna está sufriendo la mayor aridez desde que fue recuperada en el año 2009. En estos momentos el nivel de agua ha descendido drásticamente y únicamente los canales presentan una delgada lámina; en la mayor parte del humedal –el segundo más extenso de España después de las Tablas de Daimiel– se puede apreciar el barro cuarteado de los fondos lacustres.


A la falta de lluvias se han sumado las elevadas temperaturas registradas hasta hace pocos días y la temporada de riegos que han terminado de secar el humedal, visitado anualmente por cientos de personas amantes de la naturaleza y expertos ornitólogos.


El director de la Fundación Laguna del Cañizar, José Carlos Rubio, manifestó que es habitual que el caudal disminuya su volumen durante los meses estivales. Pero la sequía que presenta en estos momentos es la mayor desde su recuperación. "Pero no solo presenta este aspecto la laguna –subrayó Rubio–, sino todos los cultivos de alrededor".

Ahora, para los gestores del humedal solo hace falta que lleguen las ansiadas lluvias de otoño, que permitirán devolver al Cañizar el aspecto que ha tenido en estos últimos tres años.


La eliminación de carpas


El director explicó que el único elemento positivo de esta situación es que la ausencia de agua va a posibilitar la retirada de las carpas que inundan el lago. Según señaló, la presencia de miles de estos peces, que fueron introducidos de forma ilegal al poco de recuperarse el humedal, han ido con el paso del tiempo reduciendo la calidad del agua. "Las carpas remueven los fangos del fondo y los dejan en suspensión, enturbiando el líquido", explicó José carlos Rubio.


La escasez de agua ha provocado que estos peces se concentren en los lugares en los que todavía se conserva caudal, "lo que posibilitará su captura y su traslado a los lugares que determinen los técnicos de Medio Ambiente". agregó el director del Cañizar.


Las labores de recuperación de este espacio húmedo comenzaron en 2006, en una actuación apoyada por el Ministerio de Medio Ambiente. Se iniciaba así el rescate de este espacio natural que desaparición por acción del hombre en 1732.