El utilitario de moda, líder de forma ininterrumpida en su segmento desde 2001 y segundo vehículo más vendido en lo que va de 2017, se presenta ahora también con motores diésel. El nuevo Seat Ibiza, que llegó al mercado en su quinta generación el pasado mes de julio, ofrece tres versiones de gasóleo con potencias de 80, 95 y 115 caballos y cambio manual o automático DSG.

La gama de propulsores se completa con motores de gasolina de entre 75 y 150 caballos, y una mecánica de tecnología híbrida de gasolina y gas natural comprimido (GNC). Según el fabricante de coches español, con fábrica en Martorell, del nuevo Ibiza espera vender en 2018 un 78% de las unidades de gasolina, un 18% de diésel y un 4% de gas.

El nuevo Ibiza diésel tiene un precio de partida de 16.530 euros (80 CV y acabado Reference) que, con descuentos y financiación de la marca, queda en 12.760 euros. A igual potencia y acabado es, aproximadamente, unos 2.000 euros más caro que el gasolina.

El primer escalón lo cubre el 1.6 TDI de 80 CV, potencia que se ofrece entre 2.700 y 4.800 rpm, y un par motor máximo de 230 Nm, desarrollado en un régimen de entre 1.400 y 2.400 rpm. Esta mecánica va asociada a una caja de cambios manual de 5 velocidades y acelera de 0 a 100 km/h en 13,3 segundos. Su consumo medio es de 3,8 litros a los 100 km y emite 99 g/km de CO2.

El siguiente propulsor disponible es el 1.6 TDI de 95 CV, que puede ir asociado a una caja de cambios manual de 5 velocidades o automática de doble embrague DSG y siete relaciones, ésta última disponible a principios de 2018. En la variante con cambio manual, su potencia máxima se ofrece entre las 2.750 y 4.600 rpm, y el par máximo, que aumenta a los 250 Nm, entre las 1.500 y 2.600 rpm. Acelera de 0 a 100 km/h en 11,3 segundos, tiene un consumo medio de 3,8 l/100 km y emite 99 g/km de CO2.

Por último, el tope de gama en la oferta diésel lo cubre la variante 1.6 TDI de 115 CV de potencia, desarrollada entre 3.250 y 4000 rpm, con un par motor máximo de 250 Nm entre 1.500 y 3.200 rpm. Va asociado a una caja manual de 6 velocidades y consigue una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 10 segundos, con 3,9 l/100 km de consumo medio y unas emisiones en ciclo combinado de 102 g/km de CO2.

Motor silencioso y eficiente

Tanto el motor de 95 como el de 115 CV, probados por HERALDO, se muestran silenciosos y con pocas vibraciones en su marcha. Y, sobre todo, eficientes. Si el Ibiza de 2005 emitía 250 gr de NOx, principal gas causante de la contaminación en las ciudades, cualquiera de los diésel de hoy no superan los 67 gr/km de dióxido de nitrógeno. "No tiene sentido demonizar hoy los motores diésel actuales porque son de última generación y contaminan muchísimo menos que cualquier coche con más de 10 años", afirma Fernando Salvador, responsable de comunicación de la marca. Y añade, además, que "lo importante sería una renovación del parque automovilístico español, muy envejecido y contaminante", con una edad media de los vehículos de 12 años.

El Ibiza diésel no cambia su carrocería. El pequeño utilitario de Seat mide 4.059 mm de largo, 1.780 mm de ancho y 1.444 mm de alto, 1.429 mm en las versiones FR. Cuenta, además, con uno de los maleteros más amplios de su segmento, con una capacidad de hasta 355 litros.

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