Pedales por la Ribagorza

Casi 2.500 ciclistas tomarán la salida hoy en Graus en la popular Marcha, que dice adiós a su trazado original después de 15 años.

La mayoría de los participantes recogieron ayer sus dorsales en el Centro Deportivo Gradense.
Pedales por la Ribagorza
Ángel Gayúbar

Óscar de Alonso se ha dado una buena paliza para poder tomar hoy a las 8.30 la salida en la XV Marcha Cicloturista Puertos de la Ribagorza ya que se desplazó a Graus desde la localidad orensana del Barco de Valdeorras, en el otro extremo de la península. Pero da la paliza automovilística, y la ciclista que le espera en las próximas horas, por bien empleadas ya que va a disfrutar de su gran afición por coronar puertos a lomos de su bicicleta.


Por eso era ayer uno de los primeros participantes en retirar su dorsal en las oficinas habilitadas por la organización y se apresuraba a dar una pequeña vuelta en bicicleta por los alrededores de la villa ribagorzana para calentar los músculos y poder estar hoy en perfectas condiciones físicas para afrontar los 200 kilómetros del recorrido largo y superar los cinco puertos que dan nombre a la marcha cicloturista.


De Alonso sabe lo que le espera, no en vano esta es la séptima ocasión en la que va a participar en la Puertos de la Ribagorza y conoce perfectamente esta ruta cicloturista que, confiesa, le encanta. "Me gusta andar en bici y venir a los Pirineos, al menos, una vez al año", comentó. Y sobre su predilección por la prueba ribagorzana, apuntó que no está tan masificada como la Quebrantahuesos y que tiene otros atractivos que le han hecho un habitual de la prueba. "Me gusta el paisaje por el que discurre la Marcha, subir y bajar montañas, se cabe bien en el pelotón porque no somos demasiados, la organización es perfecta, está todo muy próximo, bien señalizado, hay muchos voluntarios excelentemente predispuestos a ayudar a los ciclistas y todo hace que nos encontremos muy a gusto", explicó acerca de su fidelidad a esta Marcha.


Uno de los que se estrenará en la prueba es Josep Orozco, un catalán de Vic (Barcelona) que afronta por primera vez el recorrido de la Puertos de la Ribagorza. "Yo me enteré de la existencia de esta Marcha por el boca a boca en los corrillos de los aficionados al ciclismo, donde se habla mucho y bien de esta carrera. Se dice que es muy chula", afirmaba ayer mientras conversaba con otros participantes.


Ellos son solo dos de los casi 2.500 ciclistas que esta mañana toman la salida en la Marcha Cicloturista Puertos de la Ribagorza, una prueba considerada como una de las mejor organizadas de nuestro país y que en su decimoquinta edición afronta el adiós al recorrido original en el que se ascienden los puertos de Laguarres, Vilas del Turbón, Bonansa, Espina y Fadas y se establecen sendos trazados largo, de 200 kilómetros, y corto, de 133, en función de las fuerzas de los participantes.


El cambio de trazado, motivado por las exigencias de potenciar la seguridad viaria y de colapsar lo mínimo posible la circulación rodada por las principales carreteras de la comarca, se hará efectivo en la edición de 2016 pero ya este año conlleva la adopción de varias medidas, como unos tiempos de corte más exigentes que nunca o la colocación de conos en más de 60 kilómetros de las carreteras para dejar libre uno de los sentidos de la marcha para el paso de los vehículos. Aun así, de 8.10 a 16.40 se verán afectadas por cortes las carreteras N-260, N-123, A-1605, A-1606 y A-139.


"Más de 500 personas estamos implicadas en la organización para procurar que todo discurra de la mejor manera posible", destaca Jorge Torres, director de la Marcha. Los voluntarios juegan un papel imprescindible y son uno de los activos principales para el éxito de esta cicloturista ribagorzana que se ha visto obligada a rechazar alguna solicitud de última hora "por motivos de logística", lamenta.