El mar de los acuarelistas de Teruel

El mar, en sus diferentes versiones, es el gran protagonista de las obras que los miembros de la Asociación de Acuarelistas de Teruel exponen desde el jueves en la residencia Santa Emerenciana de la capital.

Por la izquierda, Pascual Berniz, Manuel Saz, Anacleto Armunia y Rafael Ibáñez.
El mar de los acuarelistas de Teruel
A. G/Bykofoto

Abstracto o figurativo, bajo crepúsculos rojizos, furioso contra las rocas o sereno sobre la arena, el mar, en sus diferentes versiones, es el gran protagonista de las obras que los miembros de la Asociación de Acuarelistas de Teruel exponen desde el jueves en la residencia Santa Emerenciana de la capital.


La inauguración se convirtió en todo un acontecimiento cultural con la actividad extraordinaria del pintor y director de la Asociación, Pascual Berniz, que realizó una acuarela rápida en directo en presencia de un numeroso público. Mientras plasmaba con sus pinceles la figura de un niño jugando con sus manos, Berniz recitó un poema de la poetisa guatemalteca Isabel de los Ángeles Ruano, una artista septuagenaria poco conocida que actualmente vaga por la Ciudad de Guatemala como vendedora ambulante. Junto a Berniz se encontraban los acuarelistas Pedro Rubio, que aportó unas obras con marcado aire surrealista, o Manuel Saz, apostando por un mar embravecido. Anacleto Armunia se inclinó por la imagen de las olas batiéndose contra las rocas, y Marian Rubio, por las clásicas estampas marinas. La residencia Santa Emerenciana albergará la muestra, integrada por una veintena de obras, hasta el 13 de febrero. Antes, el próximo miércoles, se desarrollará en este mismo recinto una actividad de pintura a la acuarela en la que participarán los nueve autores de los trabajos expuestos. Este espacio docente se ha convertido con los años en un lugar de referencia cultural en la capital, un proyecto impulsado por su director, Rafael Ibáñez.