VIAJA POR PAÍSES PARA CONOCER PUEBLOS

Una aragonesa en Harvard

Asun Cano viaja por el mundo a base de becas y dedicación para ampliar sus estudios de economía y sociología.

Asun Cano.
Una aragonesa en Harvard
CARLOS MONCÍN

«Hay mucha diferencia entre viajar para ver países o para ver pueblos», señalaba el filósofo suizo Jean-Jacques Rousseau. Con solo 27 años, Asun Cano viaja por países para conocer pueblos, gracias a un excelente currículum que le ha abierto las puertas de universidades tan importantes como Harvard. Estudió Administración y Dirección de Empresas en la Universidad de Zaragoza, pero su verdadera pasión es investigar las organizaciones en distintas sociedades y desde diversos puntos de vista.


Empezó con cursos de verano en Londres, en la Escuela de Económicas y Ciencias Políticas (la prestigiosa London School of Economics & Political Science), donde luego volvería para estudiar un máster con la beca 'Ramón Areces', hasta cruzar el Atlántico directa a la Universidad de Harvard en Massachusetts (EE. UU.). Ahora viene de Asia, de visitar Taiwán, Hong Kong y Pekín, donde ha realizado varios estudios de campo. Tras unas merecidas vacaciones por Europa, volverá de nuevo a Boston para terminar el posgrado en Sociología Económica y Estrategia, que realiza con ayuda de una beca de La Caixa. Estos viajes le han permitido conocer diferentes culturas y sobre todo un montón de gente. «Lo que más valoro es la cantidad de amigos de todo el mundo que he hecho», explica esta zaragozana.


Asun Cano ha destacado siempre en sus estudios con calificaciones sobresalientes. Aun así, afirma que para conseguir las becas que le han permitido viajar, no siempre es necesario ser la mejor: «Hay que moverse mucho y probar todas las posibilidades». Nunca había pensado que su futuro estaría tan lejos de aquí, fue un profesor de la Universidad de Zaragoza el que le abrió los ojos y le animó a salir fuera, algo que agradece enormemente. Como estudiante y experta en organizaciones, puede comparar los distintos modelos educativos según la cultura y el país, y para ella el mejor es el de EE. UU.: «Allí el alumno es el protagonista. Organizamos debates en los que el profesor actúa solo de guía. Es un poco lo que se está intentando ahora con Bolonia». «En España -añade Asun- estudias carreras muy específicas, allí dan más libertad al alumno, puedes escoger asignaturas de otras titulaciones y te formas más globalmente».


¿Y en Asia? «Allí la cultura es diferente, los profesores son como segundos padres que los estudiantes unen a sus amigos mezclando sus redes sociales», explica. Aunque aquí, defiende Asun, hay buenas universidades, aconseja a los jóvenes salir del país: «Da igual si es para estudiar la carrera, un Erasmus o un posgrado. Son grandes oportunidades para conocer otras culturas, y sobre todo para tener amigos en todo el mundo». La vida de esta joven viajera no se centra solo en el trabajo, desde pequeña compaginó el colegio con una gran afición: la música. Tiene el título de profesora de piano del Conservatorio de Música. Fue difícil ya que los últimos año exigen muchas horas de práctica... y sacrificio. «Ya en el instituto -recuerda-, me acostumbré a trabajar hasta los fines de semana y eso me ha servido luego».


A pesar de que Asun valora lo aprendido en estos años, cuando termine su estancia en Boston, su deseo es volver a España, y si es posible a Zaragoza (donde reside su familia) para trabajar. «Habría que favorecer a los jóvenes para que tengan oportunidades, que puedan volver y quedarse. Es necesario que los políticos apoyen nuevas iniciativas», opina, consciente de que hoy en día son más los que tienen que emigrar que los que pueden volver. Aquí pretende trabajar en cualquier tema relacionado con las organizaciones o incluso emprendiendo su propio negocio si las circunstancias lo permiten. Cuando habla de sus viajes concluye bromeando: «Solo me falta África». Quizás antes de volver a Zaragoza pueda hacer escala en el continente africano para completar su colección.