EUTANASIA

Un barcelonés muere en Suiza en un suicidio asistido con la ayuda de sus hijas

Un anciano barcelonés de 80 años aquejado de problemas respiratorios ha muerto en Suiza por suicidio asistido, de la mano de la asociación Dignitas y gracias a la ayuda de sus dos hijas.


Núria, unas de las dos hijas del fallecido, explicaba ayer en 'El Periódico de Catalunya' las circunstancias de esa muerte asistida, ocurrida el pasado 18 de octubre en una casa situada en un pueblecito entre Basilea y Zúrich. La hija del anciano decidió hacer público el caso de su padre para reclamar cambios legislativos que garanticen el derecho a una muerte digna y un suicidio asistido en España.

El fallecido, Jordi, que arrastraba varias dolencias, convocó a sus dos hijas en abril del año pasado y les leyó una carta en la que, tras confesarles que sentía que no le quedaba "más vida", les pedía ayuda para un suicidio asistido.

La familia se trasladó a Basilea y acompañó a Jordi a la casa donde se le administró un fármaco que acabó con su vida en diez minutos.

Fuentes jurídicas consultadas coincidieron en señalar que el suicidio asistido en Suiza no puede ser perseguido penalmente desde España, al no constituir delito en la jurisdicción helvética.

Jordi Nieva, profesor de Derecho Administrativo y Procesal de la Universidad de Barcelona (UB), puntualizó que solo son perseguibles penalmente desde cualquier tribunal del mundo los crímenes contra la humanidad, así como otros supuestos legales muy concretos.